Suez, dueña de Agbar, cambia de manos: Veolia compra el 29,9% a Engie
Engie, empresa pública francesa que controla el grupo Suez, acepta la oferta de 3.400 millones de Veolia por el 29,9% contra el criterio de la dirección
Suez ha pasado de sondear la venta de Agbar a ser ella misma la vendida. Engie, empresa energética francesa controlada por el gobierno, ha aceptado vender su participación de control en Suez, del 29,9%, a Veolia por 3.400 millones de euros, según comunicó este lunes.
Este cambio de manos dirige al gigante galo de aguas y servicios, propietario de Agbar y participado por Criteria (La Caixa), hacia el conflicto e inevitablemente habrá cambios importantes en Suez. Su dirección se oponía frontalmente a la entrada de Veolia pero Engie ignoró su posicionamiento.
Suez no quería la entrada de Veolia porque es competidora directa y teme terminar desapareciendo. Por ello, busca una alternativa: una opa del fondo Ardian, que ya es accionista de Suez. Esta vía se complica pues Veolia tiene intención de lanzarla cuando cierre la compra del 29,9% y quiere hacerla amistosa.
La vía de Suez es complicada porque, como ha demostrado con la venta a Veolia, tiene al Estado francés en contra. El ejecutivo de Emmanuel Macron ha preferido esta vía porque, como la gran mayoría de países, apuesta por lo que se llama los campeones nacionales: gigantes empresariales fuertes capaces de competir también a nivel mundial.
Agbar y La Caixa observan la guerra desde la trinchera
En medio de este fuego cruzado se encuentras dos empresas españolas: Agbar y nada menos que la Fundación Bancaria La Caixa, que controla el que será el banco más grande de España, Naturgy y tiene participaciones significativas en otras cotizadas, como Cellnex y Telefónica.
El grupo que dirige Isidro Fainé se quedó con un 6% de Suez cuando le vendió la totalidad de Agbar y ahora observa la batalla desde la trinchera. Fuentes cercanas al directivo de Manresa aseguran que no tiene una decisión tomada con respecto a su participación en el grupo francés y, en todo caso, si hay una opa ya la tomará. No es descabellado que acuda a ella.
Si Criteria tiene de momento poco que decir, todavía menos Agbar. La actual dirección de Suez la había puesto a la empresa de aguas de Barcelona en la lista de activos para la venta por la presión del fondo Amber, pero la pandemia de coronavirus había congelado la posible operación.
Ahora, la compañía que preside Ángel Simón –que también es vicepresidente de Suez– permanece a la espera de que avancen los cambios en su accionista único y que la nueva dirección, sea de Veolia o no –dependerá de si hay opas y contraopas– decida si mantiene la intención de vender Agbar.