El Santander ofrece prejubilaciones a partir de los 55 años con el 70% del salario
Los sindicatos rechazan en la mesa de negociación la primera propuesta que consideran "inasumible"
El Banco Santander ha lanzado a los sindicatos la primera propuesta formal para llevar a cabo el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), con el que pretende recortar cerca de 3.000 puestos de trabajo. La dirección ha ofrecido un plan de prejubilaciones al que podrán acogerse los empleados mayores de 55 años. Los trabajadores disfrutarán de más beneficios económicos en función de su edad y de la antigüedad.
La entidad de Ana Botín ha llevado a la mesa de negociación su proyecto de reestructuración con el objetivo de evitar salidas traumáticas entre la plantilla. El plan de prejubilaciones se ha diseñado para ofrecer mayores garantías a los trabajadores de más edad pero no ha obtenido todavía consenso de los agentes sociales.
Los que mejores condiciones tendrán serán los empleados de entre 58 y 61 años que lleven al menos 15 años vinculados al banco. Podrán disponer del 70% del salario pensionable. O bien optar por un porcentaje del 65%, al que se agregará el 50% del complemento voluntario personal.
El Santander ofrece 20 días por año a los trabajadores de 62 años o más
El siguiente escalón de las horquilla de prestaciones es el de los empleados que tengan entre 55 y 57 años, también con 15 años de antigüedad en el banco. Podrán acceder a una prejubilación con el 65% del salario pensionable y un descuento del importe de desempleo durante los próximos dos años.
Si esa fórmula no les convence, la dirección les ofrece la opción de disfrutar del 55% del salario pensionable y del 50% del complemento voluntario personal. Una propuesta a la que también se suma el descuento de desempleo durante dos cursos.
Para los trabajadores que tengan 62 años o más, el Santander propone una indemnización de 20 días por año trabajado, con un máximo de 12 mensualidades.
El Santander propone indemnizaciones para despedir a los más jóvenes
El banco de Ana Botín también ha trasladado a los sindicatos una propuesta para facilitar la salida de aquellos trabajadores que tengan menos de 55 años pero lleven al menos 15 años en la entidad. Les ofrece una compensación del pago de 30 días por cada año que ha trabajado, con un máximo de 20 mensualidades.
Los sindicatos rechazan la primera propuesta
La propuesta del Banco Santander no ha gustado a los sindicatos que forman parte de la mesa de negociación y que consideran que se aleja mucho de sus pretensiones. Las organizaciones exigen mejores condiciones económicas para los trabajadores que abandonen la entidad y un compromiso sobre el número de oficinas que cerrarán sus puertas tras la reestructuración.
Comisiones Obreras ha calificado el plan presentado por la dirección como “inasumible” y ha insistido en que “dista mucho de los acuerdos” que se han mantenido con el banco en el pasado con otros recortes de plantilla.
La Unión General de Trabajadores ha apuntado en la misma línea y ha calificado el ajuste como “inadmisible” ya que las condiciones marcadas por la entidad son “insuficientes para cubrir este expediente con voluntariedad real”
Ante esta situación, han hecho saber al banco su intención de seguir peleando para proteger a la plantilla. Quieren blindar a algunos sectores como los empleados con enfermedades, personas de baja maternal o paternal o trabajadores cuya pareja está en paro para que no pueden ser despedidos, a no ser que accedan voluntariamente a las condiciones.
El plan de reestructuración de el Banco Santander pretende recortar cerca de un 11% de la plantilla en un momento de crisis económica para el sector financiero que ha desatado un aluvión de fusiones bancarias y una deriva hacia un modelo cada vez más digital de la banca.