Sabadell se da tres años para vender TSB
Los problemas de la filial británica se cuelan en la junta de accionistas del Sabadell, que prepara un nuevo plan estratégico para el negocio en las islas
TSB ha condicionado los resultados de Banc Sabadell durante el pasado ejercicio. Su presidente, Josep Oliu, así lo reconoció nada más comenzar su intervención en la Junta General de Accionistas celebrada este jueves en Alicante. “La finalización de la migración tecnológica del banco británico se ha completado, aunque con unos costes extraordinarios superiores a los previstos”. Más adelante reconoció que “la migración tecnológica de TSB ha marcado sin duda el ejercicio”.
El Sabadell ha descartado la venta de la entidad. No tendría, a día de hoy, ningún sentido después de la inversión realizada y los costes extraordinarios soportados. TSB tiene todavía una estructura pesada. Pero el objetivo es claro: «Tiene que ponerse en perfecto estado de revista en tres años. Entonces será un candidato a formar parte del proceso de consolidación del sector bancario británico. Entonces, veremos”, dijo Oliu. Antes de tres años, nada.
Banc Sabadell obtuvo un beneficio neto de 328 millones de euros en 2018, un 54% menos que en el ejercicio precedente. La culpa de este retroceso hay que buscarla en los costes extraordinarios de la informatización de TSB y en el saneamiento inmobiliario del grupo, que costaron a la cuenta de resultados más de 637 millones de euros.
Oliu asegura que el Sabadell no notará el brexit
A pesar de este desajuste en la cuenta de resultados, el Sabadell no tiene intención alguna de deshacerse de su filial; ni siquiera en el supuesto de que hubiera un Brexit abrupto. “Es una entidad centrada en el mercado británico, doméstica. El Brexit no se va a notar. Estamos preparados para lo que pueda ocurrir, porque algo ocurrirá”, dijo el presidente.
Todos los planes que el banco catalán tenía para TSB han quedado aplazados un año. La nueva responsable de la entidad, Debbie Crosbie, se incorpora a sus funciones ejecutivas el próximo mes de mayo. Su primera responsabilidad será presentar un nuevo plan estratégico el próximo otoño.
¿Cómo será TSB en el futuro? “Un banco más pequeño, dedicado al retail, la banca tradicional, con mucha más y mejor tecnología”. El objetivo es que deje de restar rentabilidad al grupo y contribuya a incrementar el ROTE, lo que exigen los accionistas principales del banco: los fondos de inversión. No será nada diferente de lo que suceda en España. Es la tendencia natural cuando las relaciones entre los clientes y los bancos han pasado a depender, en la mayoría de las ocasiones, del teléfono móvil y las tabletas.
Oliu, que no escondió los problemas derivados de la migración informática, culpó a los efectos mediáticos generados desde las redes sociales de buena parte de los sobrecostes adicionales provenientes de los casos de fraude y del tratamiento regulado de la compensación a los clientes afectados.
En la junta se le veía tranquilo. Confiado. Seguro de que la situación es remontable. “No estamos contentos, pero ya se nos pasó el dolor de cabeza”. Buena prueba de ello es que “en diciembre, TSB alcanzó su récord semanal histórico de solicitud de hipotecas”, según aseguró ante los accionistas el consejero delegado, Jaume Guardiola.
TSB tenía a finales de 2018 una inversión crediticia de 30.009 millones de libras, un 2,7% menos que un año antes. Los depósitos de clientes cerraron el año en 29.084 millones de libras, un 4,7% menos que en 2017.