S&P rebaja la calificación de DIA pese a la opa propuesta por Fridman
La agencia de calificación considera que DIA tiene alta probabilidad de insolvencia y hunden el rating de los supermercados en el bono basura
S&P hunde más a DIA en el bono basura. La agencia de calificación americana rebaja el rating de la cadena de supermercados al CCC. El recorte se da a pesar de que el magnate ruso Mijaíl Fridman (Letterone) haya lanzado una opa por el total de la compañía, lo que llevó a las acciones a dispararse el 60%.
Con esta calificación, S&P entiende que DIA tiene una alta probabilidad de insolvencia. Esto se debe a que consideran que tanto el plan de asegurar su financiación hasta mayo de 2019 con la ampliación de capital de 600 millones de euros como la opa de Fridman «conllevan riesgos de ejecución significativos y resultados inciertos».
Ni el plan de ampliación de capital por 600 millones de euros y la idea de llevar a cabo una refinanciación bancaria del consejo, ni el plan de Letterone de hacerse con el total de la compañía y aumentar capital en 500 millones parece convencer a la agencia.
S&P no descarta problemas de liquidez a corto plazo, una conversión de deuda o reorganización del capital en los próximos 12 meses
Es la cuarta vez desde mediados de octubre que S&P rebaja el rating de DIA. La última vez fue justo antes de que la compañía suscribiera el acuerdo de refinanciación de deuda bancaria y a la espera de realizar una ampliación de capital, asegurada por Morgan Stanley y prevista para el primer trimestre de 2019.
S&P recuerda que el nuevo equipo directivo de la cadena de supermercados se encuentra en la actualidad en proceso de revisión y posicionándose con un enfoque estratégico y operativo, «a la luz de los diversos desafíos a los que se enfrenta la compañía».
La agencia de calificación espera además que la dirección estratégica de la compañía evolucione, dependiendo del resultado final de la refinanciación y la ampliación de capital. Aún así, no descarta «problemas de liquidez a corto plazo, una conversión de deuda o reorganización del capital en los próximos 12 meses».
Los accionistas minoritarios, en contra de la opa
Por su parte, los accionistas minoritarios se mostraron en contra de la oferta de Fridman al considerar que el precio de la acción está infravalorado de forma artificial por los fondos bajistas.
Así, están convencidos de que el precio por acción debe estar más cercano al precio inicial de la salida de bolsa de la compañía en 2013, que fue de 3,50 euros. Los accionistas creen que el precio mínimo de salida debería ser de, al menos, dos euros.
La oferta fue realizada por el fondo Letterone por 296 millones de euros, a razón de 0,67 euros por título. El fondo del magnate ruso ya controla el 29% del capital, lo que le convierte en el principal accionista. La operación supone una prima del 56% sobre el precio al que cerraron las acciones el lunes: 0,4293 euros.
La propuesta del inversor ruso está condicionada a la aceptación de, al menos el 35,49% del capital de DIA, que junto al que ya es propiedad de Letterone, supondría una participación mínima del 64,50%.