Nuño de la Rosa: un gestor “de la secta verde” para El Corte Inglés

“En el primer contacto es un tipo seco, distante, pero es debido a su timidez. Luego es un tipo encantador”, dice el consejero delegado de una cadena de agencias de viajes rival. Tras dos décadas dedicadas Viajes El Corte Inglés, Jesús Nuño de la Rosa se erigió este jueves como el nuevo presidente de los grandes almacenes tras apoyar el cese de Dimas Gimeno. Los que lo conocen lo definen como un gestor; el calificativo ideal para presidir una empresa bajo la sombra de las hermanas Álvarez y el Clan Navarro.

Casado y con dos hijos preadolescentes, Nuño de la Rosa es prácticamente un adicto al trabajo. “Te puedes ir a tomar un par de cervezas con él después de un congreso y, si entras en su círculo de confianza, seguirá dándole vueltas a sus preocupaciones laborales”, añade otro. “Es un auténtico currante”, zanja.

Sin embargo, este obrero de El Corte Inglés no suele dar grandes brochazos de genialidad. “Digamos que es un gran ejecutor, pero la genialidad no es su fuerte”, añade un directivo que ha convivido con él. Tampoco se lo pedirán: los consejeros navarros Florencio Lasaga y Carlos Martínez Echevarría y Marta y Cristina Álvarez serán quiénes moverán los hilos.

Muchos vinculan su excelente relación personal con Marta a su flamante ascenso. Ya en noviembre de 2017 fue nombrado consejero delegado junto a Víctor del Pozo; un primer paso desde el que se ha ido alejando de las hermanas Álvarez para acercarse al veterano Lasaga, el hombre que apostó cuando la hijastra de Isidoro Álvarez quería ser presidenta.

Así, su función será la de mantener a un accionariado contento en una empresa que tiende últimamente a la autodestrucción. «Es un producto de la secta verda –así llaman muchos a los grandes almacenes–, una empresa que no se renueva y muy endogámica, confío poco en que incorpore a muchos profesionales ajenos», auguran en el sector.