Nissan se reafirma: no habrá coche pese a la rectificación de Govern y sindicatos
El paso atrás de la Conselleria de Empresa y los representantes de los trabajadores no impresiona a la firma japonesa
De nada ha servido que el Govern haya llamado a los sindicatos de la planta de Nissan en Barcelona para salvar in extremis la fabricación de un nuevo turismo a partir de 2014 en la Zona Franca. La mediación de la conselleria de Empresa y Empleo, liderada por Felip Puig, no ha modificado ni un ápice la postura de la multinacional japonesa, que asegura que el coche está perdido.
El conseller Puig y el director general de Relaciones Laborales, Ramon Bonastre, se han reunido hasta las 21.00 horas de este lunes con los representantes de Sige-Usoc –primera fuerza sindical–, Comisiones Obreras (CCOO) –segunda fuerza– y de Unión General de Trabajadores (UGT), para consensuar un acuerdo y hacérselo llegar a la compañía. Usoc ha sido el primero en firmar e instar al resto a ratificar el convenio que proponía Nissan para conseguir el turismo. Govern y sindicatos esperan que el acuerdo consensuado entre los representantes de los trabajadores sea aceptado por la dirección de Nissan. Pero el acercamiento llega demasiado tarde.
Inversión y generación de empleo
Estaban en juego cerca de 1.000 puestos de trabajo, otros 3.000 indirectos y una inversión de 130 millones de euros. El viernes, Nissan aseguraba en una declaración institucional que se había perdido la oportunidad de fabricar el turismo compacto en la planta catalana.
Los sindicatos se lo tomaron como un ultimátum, y no se creían que fuera una decisión definitiva. Pero este lunes, la compañía nipona ha reafirmado su postura, y ha lamentado que justamente este lunes aprobaran las mismas medidas que se venían negociando desde julio de 2012.
Se acabó el tiempo
El portavoz de la sección sindical de Sigen-Usoc en Nissan, Pedro Ayllón, ha defendido la firma en el último momento tras consultar este sábado a unos 400 afiliados su opinión, los cuales aprobaron por unanimidad aceptar el acuerdo. Y eso mismo es lo que han rubricado este lunes bajo la atenta mirada del nuevo conseller de Empresa, quien no se había pronunciado hasta el momento ante la delicada situación que se respiraba entre la dirección y los sindicatos.
Pero lo cierto es que en 2014, Nissan Barcelona dejará de producir dos vehículos –la furgoneta x83 y la Pathfinder–, que afectará a un mínimo de 380 trabajadores temporales así como a trabajadores con contrato indefinido. Y si a este escenario se le suma la pérdida del nuevo turismo, la planta se dirigirá hacia una “muerte lenta”, tal y como vaticinaba el consejero director general en España, Frank Torres, en el comunicado del pasado viernes.