Nissan Barcelona asegura su futuro con la diversificación de la producción

Los trabajadores y la dirección de Nissan Barcelona ya pueden respirar tranquilos después de medio año de intensas negociaciones. O “por lo menos hasta 2021”, según los sindicatos. En 2014 llegará el nuevo turismo adjudicado este lunes a la fábrica de la Zona Franca y con él, una inversión millonaria y nuevas oportunidades de negocio.

La negociación colectiva ha conseguido una inversión de 130 millones de euros, 1.000 puestos de trabajo directos, otros 3.000 indirectos, el ansiado atractivo ante la dirección nipona y alcanzar una cifra récord de producción en un año a partir de 2014: hasta 200.000 unidades.

Nuevos segmentos de producción

Con la confirmación y la foto oficial del consejero director general de Nissan Motor Ibérica, Frank Torres, junto a representantes gubernamentales, se cierran seis meses de tensión y se abre la puerta a nuevos segmentos de producción.

Hasta la fecha, la planta catalana había dedicado su producción a los vehículos industriales y a los 4×4, pero ahora también podrá competir por turismos como el que producirá, cuya medida tendrá unas proporciones similares al Seat León.

En julio de 2014 se empezarán a producir 80.000 unidades del nuevo modelo, tal y como ha confirmado Torres. La fabricación del vehículo se sumará a las 24.000 unidades anuales adicionales de la furgoneta One Ton Pick Up, y al ensamblaje de la caja de cambios para vehículos eléctricos Nissan LEAF y eNV200. Sortear la caída de ventas de vehículos industriales se ha convertido en una necesidad, y ahora el nuevo turismo da alas para conseguir superar las pérdidas en este segmento.

Valoración sindical

Las negociaciones dejan un sabor agridulce a los sindicatos que han visto como tenían que ceder ante la doble escala salarial a cambio del turismo. Pero a cambio, han conseguido que el 20% de diferencia salarial entre nuevas contrataciones y antiguos compañeros se invierta en formación dentro de la jornada laboral.

El secretario general de Comisiones Obreras (CCOO), Joan Carles Gallego, ha acudido junto a sus homólogos de Unión General de Trabajadores (UGT) y Unión Sindical Obrera de Catalunya (Usoc) a la puesta en escena del acuerdo.

Gallego destacaba que el proceso ha dejado constancia de que el segundo sindicato en la planta “ha rechazado el chantaje por parte de la dirección”. Fuentes sindicales han querido aclarar que el nuevo coche se ha conseguido a cambio de nuevos sacrificios laborales.

Mas se justifica

El presidente de la Generalitat, Artur Mas, también ha acudido junto al conseller de Empresa y Empleo, Felip Puig, y otros miembros del Govern. En él, Mas ha defendido la falta de intervención gubernamental estos últimos seis meses asegurando que la primera indicación que le dio a Puig era encargarse de Nissan. Además, ha defendido que la inversión de la japonesa evidencia el atractivo de Catalunya a ojos de las multinacionales.

«A todos aquellos que se ofuscan un poco porque dicen que Catalunya sólo se ocupa de determinadas cosas, quiero decir que nuestro gobierno ha destinado tantas horas a Nissan como a cualquier otra cosa”. Para el nuevo Govern, la política industrial es lo más importante que tiene sobre la mesa. O eso asegura al tiempo que niega que el proyecto soberanista de CiU sea el único objetivo del Ejecutivo de Mas.