Nadia Calviño desobedecerá al BCE en la privatización de Bankia
La ministra de economía asegura que el precio de Bankia en bolsa es demasiado bajo para plantear que el Estado salga del capital. Así que desobedecerá al BCE
A pesar de las demandas de la cúpula de Bankia, el Gobierno descarta ahora mismo la privatización de la entidad. “No es un buen momento”, defendió la ministra de economía, Nadia Calviño.
La razón: el bajo precio de la acción y la falta de prisas para abandonar el capital de la entidad. Una opinión que coincidió en junio con la del presidente de la empresa, José Ignacio Goirigolzarri, pero que choca con las recomendaciones europeas.
“Está claro que el valor de la acción tan bajo –cotiza a 3,16 euros la acción frente a los 3,92 con los que empezó el año— no se corresponde con las bases de Bankia, que es un banco bien gestionado, las ratios en la línea del resto del sector y con perspectivas positivas”, desgranó Calviño. Y zanjó: “No es buen momento para privatizar”.
El Ejecutivo liderado por Pedro Sánchez se tomará con calma la salida de la entidad, pues tiene hasta finales de 2019, cuando finaliza el compromiso, para abandonarlo.
“Lo importante es hacer las cosas bien y no apresuradas”, defendió Calviño tras recordar que el gran objetivo del Gobierno es recuperar el máximo de las ayudas otorgadas.
Goirigolzarri: «Para vender Bankia hay que ser oportunista»
En febrero, Goirigolzarri pidió una nueva venta de acciones. «Creemos que sí es un buen momento para vender Bankia”, aseguró durante la presentación del plan estratégico 2018-2020.
«La privatización es una cosa muy positiva», añadió el presidente de la entidad, que destacó que la entidad trabaja y «se está dejando la piel» para devolver las ayudas públicas.
En junio, el mismo ejecutivo puso la empresa en el escaparate: “Cualquier compañía que está en el mercado está sujeta a posibles operaciones; si llega una y es buena para los accionistas, bienvenida sea”.
No obstante, comenzó a alinearse con las tesis de Calviño. “Con la acción a 3,30 euros, hay que ser oportunista, en los próximos meses el Banco Central Europeo (BCE) elevará los tipos de interés por lo que esperamos que entonces acabe la penalización”, auguró.
A pesar de dilatar la privatización completa, el primer ejecutivo de Bankia también advirtió de que “la privatización no se puede eternizar”.
Además, disparó contra los líderes de Podemos, que constantemente ponen sobre la mesa la idea de mantener a la entidad dentro del radar público: “En estos momentos, el modelo no está en discusión”.
“No hay agobios ni prisa, pero hay que mantener una referencia de que la venta se va a producir”, indicó.
El Banco Central Europeo urge por Bankia
Sin embargo, en Bruselas podrían comenzar a perder la paciencia. El pasado abril, el BCE ya trasladó al ex ministro de economía Román Escolano su intención de que la privatización de Bankia se acelerara frente a los tiempos en los que la manejaba el Gobierno de Mariano Rajoy.
Y es que desde el organismo que preside el banquero italiano Mario Draghi entienden que cuanto antes se venda la participación de la entidad nacionalizada, antes se recuperaría el sistema bancario español.
«España debe completar la privatización y alentar a una mayor desinversión de las fundaciones bancarias en cajas de ahorros para reforzar el sector bancario español», afirmaron fuentes de la entidad a comienzos de este mismo octubre.
El fondo de reestructuración ordenada bancaria (FROB) posee algo más del 60% de la entidad, pero vendió el pasado diciembre un 7% del banco, por 818,30 millones de euros.
En febrero de 2014, el organismo público ya se desprendió de otro 7,5% de Bankia, que, tal y como defendió siempre Goirigolzarri, trabaja con el escenario de que su privatización debe estar finalizada el 31 de diciembre de 2019.