Mercadona sale al rescate de la industria lechera con su marca blanca
Mercadona, que ofrece una de las leches más baratas del mercado, lanza una campaña de promoción de una industria en pleno declive
En las redes sociales se ha lanzado el movimiento #DíaMundialdelaLeche y Mercadona desde ayer, viernes, lo utiliza como campaña para promocionar un sector que no pasa por su mejor momento y en el que la compañía pone a la venta una de los productos más baratos del sector.
La cadena de supermercados de Juan Roig, líder por cuota de mercado en España, anuncia que es una compañía que apuesta únicamente por productores nacionales, al abastecerse de proveedores totaler que trabajan con más de 3.000 ganaderos de varios puntos de España.
En concreto, añaden desde la compañía, la leche Hacendado a la venta en los supermercados procede de 3.126 ganaderos de varias zonas productoras de toda España.
🥛El 1 de junio es el #DíaMundialdelaLeche🥛En Mercadona queremos dar visibilidad a los más de 3.000 ganaderos que abastecen la leche #Hacendado 100% de origen nacional🐄🐄🐄🐄 https://t.co/hhnvFQCTM1
— Mercadona (@Mercadona) 31 de mayo de 2019
¿Dice la verdad? Sí. Los proveedores de leche de Hacendado, la marca blanca de Mercadona, son españoles. En las diferentes etiquetas de sus productos encontramos principalmente dos empresas españolas: Iparlat, dueña de la marca Kaiku y domiciliada en Guipuzcua, y la Cooperativa Andaluza Ganadera del Valle de los Pedroches (Covap).
Pero, ¿cuál es la estrategia para resistir en el mercado? Vender la leche casi más barata de todas las que ofrecen las cadenas de supermercados españoles. Así lo muestran los comparadores de precios, en los que se puede comprobar que tanto la leche entera (0,59 euros por litro), semidesnatada (entre 0,58 euros por litro y 0,69 euros por litro ) y desnatada (entre 0,57 euros por litro y 0,67 euros por litro).
Un sector en declive
Pese a que no existen cifras internas de cuánta leche vende Mercadona, los datos del sector no son los más halagüeños. Y es que el vaso de leche, que era considerado un desayuno nutritivo para los niños, cada vez tiene menos adeptos entre los españoles.
La situación actual en España es bien distinta a la de hace 70 años, cuando prácticamente la totalidad de la oferta que se consumía en España era leche cruda, que procedía de la venta directa de las explotaciones ganaderas.
El sector intenta recuperarse, afrontando que el consumo ya no es de 100 litros por persona, sino de 70. Por categorías, la que más cae es la entera. La leche semi-desnatada, por su parte, crece lentamente pero no compensa la brusca caída del resto de categorías.
Ya lo reconoció la Federación Nacional de Industrias Lácteas, Fenil, que calificó al descenso continuado del consumo de leche en España como el principal problema del sector.
“Hay una confluencia de factores. Hay más preferencia por los zumos vegetales y de frutas. La población joven, que tradicionalmente es la que bebe más leche, también se ha reducido”, explicaba a Economía Digital el responsable internacional de leche Kaiku, Juan Trincado.