Los trabajadores de Amper amenazan con ir a los juzgados si hay nuevos impagos en las nóminas
La dirección de la tecnológica afirma que la banca acreedora dejará más tiempo para refinanciar los 120 millones de crédito
La plantilla de Amper ha comunicado a la dirección de la tecnológica, encabezada por Jaime Espinosa de los Monteros, que no está dispuesta a aceptar nuevas dilataciones en el pago de sus nóminas. Fuentes del comité de empresa indican que los retrasos se han repetido desde prácticamente el inicio del año tanto en el negocio en España como en el de Latinoamérica. Amenazan con “tomar medidas” si la situación perdura.
Por el momento, la cúpula ha anunciado que este miércoles ha hecho efectivo el pago de la retribución de junio. Por lo que los trabajadores de la compañía deberían recibir el cargo en su cuenta como muy tarde el próximo viernes. “Si eso se cumple, aún quedará pendiente la extra de verano”, indican los mismos interlocutores.
Sin recursos para los próximos meses
Los gestores de Amper aseguran que el año pasado se abonó esta parte de la nómina el último día de julio, por lo que, formalmente, aún no han incurrido en ningún otro retraso. Pero admiten que volverán a incumplir sus obligaciones con la plantilla en pocos días. La tecnológica no tiene recursos para hacer frente ni a la paga extraordinaria ni a la nómina de julio. La retribución de junio se ha cubierto con la entrada de capital de unos contratos ejecutados y pendientes de liquidar.
Hasta el momento, la plantilla no había manifestado públicamente los problemas repetidos a final de mes. El comité de empresa cargó en su momento contra la gestión de Enrique Bañuelos y Yago Méndez antes de que ambos directivos salieran de la firma. “Aún persisten los problemas de gestión”, aseveran. Si la situación de impagos persiste, afirman que están dispuestos a llegar donde sea necesario para remitir la situación. Incluso abren la puerta a llevar los libros de la compañía a la justicia de lo mercantil.
Pacto con la banca acreedora
La cúpula de Amper busca liquidez “donde sea”, señalan desde el entorno de la cúpula. Los mismos interlocutores dan por sentado que los 22 bancos que participan en la refinanciación de 120 millones de euros darán el visto bueno al séptimo stand still que se aplica en el grupo. Los gestores piden hasta tres meses más para atraer a un nuevo inversor a la compañía. La alternativa, es la ejecución de las garantías del crédito sindicado. Hecho que, de facto, implicaría la quiebra del grupo, que ya opera con fondos negativos.
Amper tiene hasta este jueves para comunicar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores el nuevo aplazamiento de la refinanciación.