Los fondos de Abengoa activan un proyecto de 1.200 millones para cobrar
Cinco años después de ser adjudicado, la empresa inicia las obras del acueducto de El Zapotillo, una de las operaciones incluidas como garantía del dinero prestado
Tras tomarse unos días de vacaciones, acreedores y bonistas de Abengoa han retomado las reuniones para la redacción final al acuerdo de reestructuración financiera alcanzado el pasado 11 de agosto.
«Se espera que esté listo la próxima semana», apuntan fuentes de los bancos acreedores, para, a partir de entonces, abrir el plazo para recabar las adhesiones al mismo del 75% de los acreedores.
«No creemos que haya ningún problema», apuntan las mismas fuentes, para, seguidamente, remitir al juez de lo Mercantil 2 de Sevilla los apoyos y que los refrende, como también lo debe hacer la junta de accionista de la multinacional sevillana, cuya convocatoria tampoco se debe demorar mucho, toda vez que debe convocarse con un mes de antelación a la fecha de celebración.
Junta y cuentas del primer semestre
Además de estas nuevas adhesiones, el magistrado responsable de la situación preconcursal también tiene pendiente de dictaminar un auto sobre las impugnaciones presentadas contra las adhesiones al acuerdo de espera firmado el pasado mes de marzo.
Por su parte, la empresa también debe presentar las cuentas al cierre del primer semestre. «Hay tiempo hasta el 30 de septiembre», apuntan desde la compañía.
Los fondos mueven rápidamente los hilos
Mientras tanto, los 11 fondos de inversión que se han comprometido a aportar 655 millones de euros ya han empezado a mover los hilos para activar los proyectos que sirven de garantía de los 1.170 millones de euros que Abengoa debe devolver en un plazo máximo de 4 años.
Para ello, ya no importa tanto el resultado de explotación futuro de la multinacional, sino los flujos de caja que generen una decena de proyectos, la mitad de ellos en México. Proyectos a los que se inyectará liquidez para culminar su ejecución o desarrollar su operación y que, una vez acabados, serán vendidos para que los fondos recuperen, con creces, el dinero aportado.
Acueducto de El Zapotillo
Además de las tres plantas de cogeneración A3T, A4T y Norte 3, los fondos se han apresurado a activar el acueducto El Zapotillo, una obra de 140 kilómetros para el abastecimiento del municipio mexicano del León.
Abengoa firmó el contrato de esta concesión, para la construcción y explotación durante 25 años, en octubre de 2011, con el compromiso de ejecutar la obra en un plazo de tres años, pero las demandas judiciales interpuestas contra el proyecto y la falta de medidas de protección medioambiental, impidieron que la obra se pusiera en marcha.
Lo hizo el pasado mes de mayo. En juego están los más de 1.200 millones de ingresos contemplados para el beneficiario final de la concesión, sea Abengoa o cualquier otro.
Dinero adelantado sin iniciar las obras
Inicialmente el acueducto fue presupuestado en unos 520 millones de euros (casi 570 millones de dólares), financiándose al 49% por el Fondo Nacional de Infraestructura de México (Fonadin), y el 51% restantes por un ‘project finance’ concedido a Abengoa, y aportados por la Comisión Estatal del Agua de Guanajuato (CEA) y la sociedad Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de León (Sapal). Más de 300 millones de euros que la multinacional sevillana recibió para llevar a cabo esta vasta operación de ingeniería.
En relación a este proyecto, y ante la crítica situación financiera, el pasado mes de diciembre –ya con Abengoa en preconcurso–, la multinacional sevillana logró que Sapal aportara 122 millones de pesos a fondo perdido (unos 6 millones de euros) para iniciar los trabajos.
Presupuesto incrementado en un 20%
Cantidad que se unía al adelanto de más de 30 millones de euros (680 millones de pesos mexicanos), adelantados por las autoridades federales al adjudicar la obra.
Ahora, cinco años después, y tras varios replanteamientos, el presupuesto del proyecto se ha encarecido por encima del 20%, de manera que serán casi 700 millones de euros los que se requieran para tener acabada la obra dentro de dos años.