Los empresarios de Badalona deciden afiliarse a Pimec y a Foment del Treball

La Federació d’Empresaris de Badalona (FEB) ha marcado este miércoles un hito en las relaciones patronales catalanas. Por primer vez, una organización juega a la doble carta de la afiliación. Además de mantener sus relaciones con Foment del Treball, ha suscrito un pacto para integrarse en Pimec.

La decisión de los empresarios de Badalona demuestra que, ciertas territoriales, han sido capaces de superar las diferencias que han minado los cuatro intentos de fusión entre patronales. “Lo que no se ha conseguido desde las cúpulas se alcanza desde las bases”, ha señalado el presidente de Pimec, Josep González, en el acto en el que se ha oficializado la relación entre la FEB y la institución.

Foment se opone a la doble afiliación

Las reticencias con la operación llegan desde la otra parte. La dirección de Foment del Treball ha dejado claro en declaraciones a Economía Digital que la doble afiliación de la organización local no cuenta con su aprobación. “No está pactado”, indican sus portavoces.

Por el momento, la institución presidida por Joaquim Gay de Montellà no ha tomado ninguna decisión respecto a la relación que debe mantener a partir de ahora FEB con la patronal de las grandes empresas. Deja la puerta abierta a revisar sus vínculos en el futuro.

El mapa de organizaciones territoriales

Los ejecutivos de FEB ya habían avisado de sus intenciones desde hacía tiempo, indican interlocutores conocedores del proceso. La firma del pacto de colaboración en el Ayuntamiento de Badalona (Barcelona) ha sido el último paso de una serie de acercamientos. La organización ha hecho de su bandera que no deben existir diferencias entre instituciones con un fin común: defender los derechos de los empresarios.

Los ejecutivos de Badalona hacen gala de las similitudes entre patronales, aunque no es la actitud común de todas las instituciones empresariales territoriales. La proximidad o diferencias entre patronales es diferente según el territorio.

El caso extremo se encuentra, por ejemplo, en la comarca colindante con el Barcelonés: el Vallés Occidental. Allí, Pimec y las organizaciones territoriales de Foment (la todopoderosa Cecot de Terrassa, dirigida por Antoni Abad, y Ciesc de Sabadell) están a años luz de llegar a un pacto. En los últimos años incluso han evitado firmar pactos en los que ambos tengan presencia. Sus desavenencias provocaron que las representantes de Foment se quedaran al margen el pasado abril de un pacto de reindustrialización del territorio.