Los agricultores denuncian a Carrefour y DIA por vender pollo y aceite a pérdidas
Cuatro cadenas de supermercados serán investigadas por ofrecer productos por debajo del precio de coste
Los pequeños agricultores han iniciado una ofensiva legal contra las cadenas de supermercado que ofrecen productos por debajo del precio de coste para atraer clientes, una práctica prohibida por ley. La fijación de precios predatorios (dumping) es habitual en productos básicos como el aceite de girasol, el aceite de oliva y el pollo.
Los pequeños agricultores han presentado este año denuncias contra cuatro cadenas de supermercados: DIA, Carrefour, Leclerc y Supermercados Familia. La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos, UPA, comenzó en enero su ofensiva ante la nueva agencia alimentaria, AICA (Agencia de Información y Control Alimentario), contra Carrefour al presentar dos denuncias: una por el precio del aceite de oliva y la otra por el precio del conejo.
La primera oferta del año
Carrefour lanzó a principios de año una oferta de aceite de oliva con la compra de dos garrafas de cinco litros. La promoción permitía obtener un litro de aceite por 1,89 euros, tal y como promocionó la cadena de supermercados en sus folletos promocionales.
Los agricultores, que calificaron la promoción de “escandalosa”, aseguran que resulta imposible que la cadena venda el aceite a ese precio si no es con una venta por debajo del coste producción. La asociación UPA afirma que el precio del aceite de oliva de esa calidad en origen se ubica en 2,70 euros, según el Observatorio de Precios, y considera que, en ningún caso, el precio de coste baja de los 2,20 euros el litro.
El mes pasado, la agrupación de agricultores también presentó una denuncia contra Carrefour por vender la carne de conejo a 3,50 euros el kilo, por debajo del precio de coste, según la agrupación. Los pequeños agricultores consideran que la práctica viola la ley para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria.
El pollo
La última demanda ha sido presentada esta semana contra DIA, Leclerc y Supermercados Familia por el precio de pollo, fijado en 2,15 euros el kilo en los tres casos. Según el Ministerio de Medio Ambiente y Alimentación, los costes de producción se ubican en 2,70 euros.
DIA ha reconocido que mantiene una política agresiva de precios pero asegura desconocer cuál es el coste de producción en origen, aunque no ha explicado si pierde dinero con la venta de estos productos. Leclerc, otro de los denunciados, se limitó a contestar de forma escueta: “Leclerc siempre cumple la ley”.
“Pierden con la venta de productos concretos para atraer clientes y ganar con el resto de la cesta de la compra”, explica la asociación de agricultores que asegura que el dumping genera cierres de pequeñas empresas y la pérdida de puestos de trabajo. La recién creada agencia alimentaria todavía no se ha pronunciado sobre el contenido de las denuncias.