Las productoras tomarán Telemadrid en enero
La Comunidad prepara el concurso para entregar la programación de la cadena autonómica; el sector se resigna a que Secuoya ganará una adjudicación de hasta 35 millones
La transición en Telemadrid, que va del expediente de regulación de empleo (ERE) a la sustitución de los trabajadores despedidos por productoras, acabará en enero con la llegada del sector privado, previa adjudicación en concurso público.
Ello siempre y cuando la situación jurídica del ente se aclare. Los jueces revisan la legalidad del ERE. El Tribunal Supremo puede anular el despido del 80% de la plantilla y suspender las adjudicaciones firmadas estos meses.
Sin embargo, los trabajos avanzan de la mano del actual presidente de la cadena, Arturo Moreno –ex directivo de Telefónica–.
Hasta los informativos
A falta de que se perfilen al detalle las características de la licitación y que se oficialicen los tempos, el sector da a Secuoya, la compañía fundada por Raúl Berdonés, como favorita en la carrera.
Los pliegos, con cuyos borradores cuenta el gobierno de Ignacio González (PP), sacarán a concurso público todas las franjas horarias menos las que ocupen los espacios informativos. Esa privatización se puso en marcha en primavera.
La cadena desestimó una oferta de los trabajadores despedidos, que se presentaron al concurso para continuar con la realización de los telenoticias, a pesar de ser la más económica (160.000 euros al mes).
Compra generalizada de programas
La próxima licitación fijará una relación de cuatro años, revisables temporada a temporada. El presupuesto será de 35 millones. Se trata de una cifra menor a la puesta sobre la mesa por otros gobiernos, como el valenciano, que reserva hasta 11 millones anuales para menesteres similares.
A groso modo, se pedirá la concurrencia de las productoras para un magazine diario, programas de entretenimiento y contenidos infantiles. Es decir, hasta 1.200 horas de emisión al año, que se fraccionarán en segmentos de mañana-mediodía, tarde y prime-time.
El ‘prime-time’, aparte
Esta última franja, la de mayor consumo televisivo, se licitará aparte. Habrá un lote específico del concurso que incluirá cinco programas semanales de diferentes géneros para la emisión posterior al telenoticias nocturno. Aproximadamente 400 horas de televisión a un precio máximo de cuatro millones por temporada.
El segundo canal de Telemadrid, la Otra, se reservaría para la repetición de los contenidos. Su continuidad sigue en la cuerda floja.
Desde que el último trabajador afectado por el ERE abandonó el 12 de enero las instalaciones de Ciudad de la Imagen hasta hoy, Telemadrid vive en la provisionalidad. La audiencia está en caída libre, con medias del 4%.
Telemadrid hoy
La programación se compone de informativos, de programas repetidos y películas. Sólo tiene un tirón. A la tele madrileña aún le queda combustible de los acuerdos firmados con grandes majors para ofrecer títulos con cierta aceptación entre los telespectadores.
Las productoras deberán ocupar ese espacio que ahora sirve para proyectar los programas de archivo. Precisamente, el volumen del concurso y la tarea que se girará a los ganadores cierra la barrera al grueso de las productoras españolas.
Madrid optará por un máximo de dos empresas, mientras que otras cadenas, como la valenciana, firmarán con hasta media decena. Berdonés tiene la capacidad técnica y económica para desembarcar en Telemadrid con Secuoya como productor del mayor número de horas, según el sector.
¿El favorito?
Meses atrás dio entrada al fondo N 1 en el accionariado. Fue en ese preciso momento cuando se desmarcó del rival Vértice 360. Dicho de otro modo, se alejó de Manuel García-Durán al ganar músculo financiero.
Secuoya confirma a este diario que mantiene el interés por Telemadrid y que, si gana, afrontará el encargo con recursos propios, sin endeudarse. Actualmente gestiona los informativos de Baleares y la cadena murciana. Berdonés, además, tiene un pie puesto en la cadena capitalina. Junto a Telefónica gestiona el control técnico.