La leche catalana salta la Gran Muralla China
Llet Ato, una de las firmas más conocidas de la región, prevé vender diez millones de litros en el mercado del país asiático. Es su respuesta a la grave crisis que vive el sector en Europa
Leche de vacas catalanas en los lineales de supermercados, mesas y restaurantes chinos. Llet Ato decidió recientemente dar el salto al mercado del gigante asiático ante la delicadísima situación que vive el sector en el mercado nacional. El fin del sistema de cuotas en Europa ha generado un aumento de la producción y, consiguientemente, un desplome del precio de la leche.
Ante el excedente de su producto estrella, la compañía con sede en Vidreres (La Selva) optó por buscar alternativas en otros mercados. La puerta china se abrió gracias a la trazabilidad de su leche, así como a los estándares de producción de sus plantas, explica Jaume Pont, en el programa Duros a quatre pessetes de la Cadena Cope.
Las intenciones de Llet Ato no son ni mucho menos tímidas. La empresa aspira a vender diez millones de litros anuales en China, previsiones que les han llevado a incrementar un 25% la producción. El siguiente paso, explica Pont, podría ser otro mercado del lejano Oriente, Japón.
Efectos en toda España
La liberalización del mercado de la leche ha tenido graves consecuencias para marcas y ganaderos de toda España. Una de las regiones más afectadas es Galicia, donde el desplome de precios ha provocado graves protestas de los ganaderos; aunque también la exitosa vuelta a los súper de marcas históricas.