La inmensa mayoría del claustro de la UB pide la dimisión de Joaquim Coello
Si en los próximos días el presidente del Consejo Social del centro no dimite el rector de la universidad, Dídac Ramírez, pedirá su destitución al nuevo Gobierno de la Generalitat
Joaquim Coello renunciará en los próximos días a la presidencia del Consejo Social de la Universidad de Barcelona (UB) o el rector del centro, Dídac Ramírez, pedirá su destitución al nuevo Gobierno de Artur Mas. Así lo ha decidido por una amplia mayoría el claustro de la UB tal como se esperaba a principios de semana, cuando transcendió que el Consell de l’Alumnat presentaría esta propuesta a la reunión del viernes.
A las cuatro de la tarde, la comunidad universitaria ha mostrado su rechazo a la gestión de Coello con 63 votos a favor; 13 personas han respaldado su trabajo y 14 han votado en blanco. Lo que más ha pesado a la hora de posicionarse es el documento que salió a la luz pública en el que el empresario designado por el exconseller de Economía, Antoni Castells, en el Consejo Social apostaba por un cambio de gobernanza en el mundo universitario en que los rectores perdieran poder a favor de un nuevo organismo que se crearía. Allí no solo habría miembros de la comunidad universitaria, Coello apostaba porqué fuera “un reflejo de la sociedad civil” escogido por el Parlament de Catalunya. Un pulso de poder con Ramírez que desde el entorno del rector habían denunciado en algunas ocasiones y que finalmente ha salido perdiendo.
Fuentes cercanas a Ramírez han asegurado que al salir del claustro se respiraba un ambiente de tranquilidad y satisfacción entre el profesorado, la dirección de la UB y los trabajadores del centro. Incluso se ha llegado a aplaudir a los estudiantes que han intervenido en la reunión pidiendo a Coello que renunciara a la presidencia el Consejo Social. “Hemos actuado por el discurso incendiario que hizo el empresario durante el inicio del curso y por los graves antecedentes de su gestión, como cuando pidió que se cerraran bibliotecas de la UB o que se precarizaran los sitios de trabajo del PAS”, ha declarado a Economía Digital uno de los representantes de los estudiantes, Hugo Alvira.
El empresariado catalán, en contra
Los que se habían pronunciado públicamente a favor de la continuidad de Coello en el Consejo Social de la UB son las patronales Foment del Treball i Pimec. La organización lierada por Juan Rosell recordaba en un comunicado que durante la gestión del empresario socialista el déficit de la UB ha pasado “de los 20 millones de euros a un presupuesto equilibrado”. Por su parte, los representantes de las pimes y pequeños empresarios catalanes convocaran en los próximos días una reunión “de todos los representantes de Pimec en los Consejos Sociales de las universidades catalanas para compartir criterios”, en palabras de Alexandre Blasi, miembro del organismo de la UB. En este encuentro se hablará de la estrategia que seguirá Pimec a partir de ahora.
Coello, que no participa en los claustros de la UB, ha conocido la noticia en EEUU, donde está de viaje de negocios. Antes se había defendido en una misiva destinada a los miembros de la comunidad universitaria en la que justificaba sus decisiones más polémicas, como la de no conseguir un finanzamiemto para el centro o que la Generalitat reconozca la deuda que tiene con la UB “como tampoco el resto de las Universidades Públicas”, se lee en el documento.
En esta misma carta Coello afirma que “el pasado 24 de noviembre, y así se recoge en el acta, afirmé que mi intención era poner mi cargo a disposición del nuevo Gobierno de la Generalitat”, un propósito que aún está en el tintero.