La futura comisaria de Energía lanza un dardo a la CNMC
Kadri Simson avisa que la transición energética no puede mermar la competitividad de las empresas y señala el gas como elemento clave
La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha hecho muchos enemigos con su plan de recortar la retribución al transporte y distribución de gas y electricidad. No solo en las empresas afectadas; en Europa, la propuesta y su procedimiento han causado estupor. Por si eso fuera poco, la futura comisaria de Energía tiene una visión muy distinta de la transición energética y ha marcado unos ejes que contradicen la dirección tomada por la CNMC.
La liberal estonia Kadri Simson es la candidata designada como futura comisaria europea de Energía. Este jueves, tuvo una audiencia de tres horas ante las comisiones para la Industria, Investigación y Energía y para Medio Ambiente del Parlamento Europeo en Bruselas, en la que trazó las que serán las lineas maestras de su política ambiental y energética. Coincidiendo con su llegada a la Comisión Europea, Estonia asumirá los objetivos de neutralidad climática de la UE para 2050.
El mensaje de Simson es claro: la transición energética hacia un modelo que combata el cambio climático no puede ir en contra de la competitividad de las empresas. Y concreta en los precios: estos deben ser competitivos para que las compañías y las inversiones sean rentables. Precisamente en inversión, la futura comisaria ve una asignatura pendiente, y la inversión no se atrae bajando precios.
«Podemos ser neutrales en el cambio climático y mantener la competitividad de las empresas», asegura la futura comisaria europea de Energía
“Podemos ser neutrales en el cambio climático y mantener la competitividad de las empresas”, argumentó Simson, que añadió que hay que seguir de cerca los precios como elemento de competitividad, según recoge la agencia Efe. Los precios deben ser “asequibles” pero a su vez generar “más trabajo y más crecimiento”.
Para el modelo que la estonia defiende, las inversiones son muy importantes, y concretamente en redes, justo lo que la circular de la CNMC castiga. “Somos líderes mundiales en patentes energéticas pero nuestras inversiones no están avanzando a ritmo adecuado”, criticó Simson, que se refirió en concreto a la inversión “en redes y en mejorar el almacenamiento” como una de las claves.
Otra de las claves de la transición energética es la apuesta por el gas, que si bien es una fuente fósil, también es limpia. Junto con las renovables, “el gas va a desempeñar un papel clave en la transición hacia la neutralidad climática”. Simson habló tanto de gas natural como de biogas, gas de hidrógeno y de nitrógeno.
Las energéticas españolas, pendientes de la CNMC
Mientras la futura comisaria de Energía marca una línea clara, España parece ir por otro lado en cuanto al castigo a las redes de electricidad y gas. De hecho, el propio Ministerio de Transición Ecológica presentó alegaciones a la propuesta de la CNMC por, entre otras cosas, no tener en cuenta la política energética del gobierno.
Las empresas afectadas, desde Enagás y Naturgy en gas hasta Red Eléctrica, han montado en cólera por un recorte que puede superar el 20% y que pone en duda todo el modelo. En el caso del gas, el más perjudicado, puede hasta poner en riesgo instalaciones, por no hablar de las inversiones. Naturgy las ha frenado y los fondos de inversión que apostaron su dinero al sector energético español se plantean recurrir a la justicia europea.