La Fira implica a la empresa cazatalentos de Conde en la búsqueda de su nuevo jefe

La tarea no es nada fácil. Sustituir a Agustín Cordón como director general de Fira Barcelona está resultando complicado. El consejo de administración, que preside José Luis Bonet, se lo ha tomado con calma, pero van pasando las semanas, y, aunque internamente se asegura que todo está en marcha, la Fira necesita un nuevo impulso, principalmente porque se desea dejar claro que la actividad económica está por encima de las dificultades políticas de las distintas administraciones públicas.

El caso es que la responsabilidad es de ese consejo de administración, que dejó el trabajo de buscar el mejor perfil a Pedro Fontana. És el que lidera una comisión, dentro de ese consejo, que se encaga de la sustitución de Cordón. Pero el propio Fontana lo ha dejado en manos de Luis Conde, también miembro del consejo de administración. Se lo ha dejado, de hecho, a la empresa de cazatalentos de Luis Conde, Seeliger y Conde, para que entreviste candidatos.

Lo mismo que con la elección de Gual y Cordón

Todos los miembros de ese consejo de administración, Núria Basi, Luis Conde, Jordi Clos, Enric Crous, Pedro Fontana, Enrique Lacalle, Miquel Martí y Carles Vilarrubí, no cobran nada por participar en la Fira. Y se entiende que la mejor opción es que sea Conde, con una amplia experiencia, quien se encargue de seleccionar y entrevistar a «los muchos candidatos» que se están ofreciendo, según fuentes conocedoras del proceso.

Para el propio Conde es un honor, porque él mismo ha asegurado que en las otras ocasiones en las que Seeliger y Conde participó la elección fue buena. Se trata de los dos anteriores directores generales de Fira Barcelona, en 2000, con Josep Gual –que se incorporó luego, en 2005 a la firma de cazatalentos, un año después de dejar la Fira– y con el propio Agustín Cordón, en 2004.

Conde se incorporó en 2011

En el inicio del proceso, cuando Cordón anunció que fichaba por el Grupo Zeta, los miembros del consejo de administración aseguraron de inmediato que las opciones para sustituirlo pasaban por cargos internos, aunque no se descartaba el fichaje de ejecutivos externos, para ofrecer una imagen del poderío de la Fira. Pero Conde no aparecía en esos primeros análisis como el hombre determinante para conducir el proceso de elección, precisamente porque dirige una empresa de cazatalentos.

Cuando Seeliger y Conde participó en los procesos de elección de Gual y Cordón, Luis Conde no era miembro del consejo de administración de Fira Barcelona. Conde se incorporó, junto con Miquel Martí, el empresario del transporte, en junio de 2011, para sustituir las vacantes de Josep Lluís Jové, fallecido en 2010, y de Josep Arcas, ex presidente de Nestlé, cuyo mandato no fue renovado.

La situación, por tanto, es distinta. En 2000 y en 2004, Conde no formaba parte de la dirección de Fira. Pese a ello, Fira Barcelona, que combina un modelo de gestión público-privada del que hacen gala las administraciones implicadas, Generalitat y Ayuntamiento de Barcelona, más la Cambra de Comerç, y que defiende con pasión José Luis Bonet, presidente del consejo, no afea esa posibilidad.

Y Seeliger y Conde, la empresa cazatalentos de Conde, miembro del consejo de administración de Fira, se implicará en la selección final del sustituto de Cordón. De hecho, ya se han hecho «decenas de entrevistas», según fuentes conocedoras.