La autopista AP-36, entre Ocaña y La Roda, entra en quiebra
Es la quinta vía de pago que solicita el concurso este año
La autopista de peaje AP-36 entre las localidades de Ocaña y La Roda ha solicitado el concurso voluntario de acreedores con una deuda de unos 500 millones de euros, según informado la empresa concesionaria.
Se trata de la quinta concesionaria de vías de pago que se acoge a la antigua suspensión de pagos, después de la autopista Madrid-Toledo, y las radiales de Madrid R-4, R-3 y R-5. Además, la autopista Cartagena-Vera solicitó el preconcurso.
Sin noticias de Fomento
La sociedad concesionaria de la vía de pago que une Ocaña (Toledo) y La Roda (Albacete) está controlada por Ferrovial, que cuenta con una participación del 55%, Sacyr, con un 40% y la antigua Kutxa, con otro 5%.
La concesionaria indica que en la decisión de solicitar el concurso ha sido «relevante» el hecho de que las medidas de apoyo a la concesión anunciada por el órgano contratante, es decir, el Ministerio de Fomento, «no han sido efectivamente implementadas».
Pegada a la nacional
El gran problema de estas autopistas que han solicitado el concurso de acreedores es que las vías de pago se planificaron mal desde el primer momento, explican fuentes del sector. Muchas de ellas, por no decir todas, se construyeron muy cerca de vías nacionales o de autovías, que no son de pago.
Esto hizo desde el primer momento que los usuarios eligiesen seguir yendo con sus coches por las carreteras. En este caso, la AP-36 se construyó paralela a la N-301, la antigua carretera de Madrid a Alicante.