La apuesta por el Audi A1 deja en el aire a 400 trabajadores de Seat
Fabricar un A1 necesita menos puestos de trabajo que un Q3, lo que según los sindicatos generará un excedente de plantilla. La marca espera cubrir el bajón fabricando más coches
Raramente la asignación de un nuevo modelo a una fábrica de coches ha sido tan mal recibido por su plantilla como la del Audi A1 en Martorell. Aunque todavía quedan más de dos años y medio, los trabajadores temen que el cambio del Audi Q3 por el A1 generará un excedente de trabajadores, que fuentes sindicales han cifrado entre 300 y 400 personas.
Audi ha anunciado este miércoles que se lleva a Hungría el SUV Q3, que se fabrica desde su salida al mercado, en 2011, en Barcelona en exclusiva mundial. A cambio, la marca del grupo Volkswagen fabricará en la planta catalana la nueva generación del A1, el modelo más pequeño de su gama. Ambas cosas pasarán en septiembre de 2018, según las previsiones de Audi.
Nueve horas menos por coche
La posibilidad de recibir este nuevo modelo era vox populi entre la plantilla de la fábrica de Martorell, que esperaba que eso no supusiera la marcha del Q3. Finalmente, se han cumplido sus peores presagios, ya que para fabricar un A1 se necesita menos tiempo y, por tanto, menos plantilla, que un Q3.
En concreto, para fabricar un Q3 se necesitan 27 horas de trabajo, mientras que para un A1 se requieren 18 horas. Es decir, un tercio menos. Actualmente, trabajan en la línea 3 de Martorell, la que produce el Audi, unas 2.000 personas a tres turnos. Los sindicatos calculan que entre 300 y 400 de estos trabajadores puedan no tener cabida para producir el A1.
La incógnita de la producción
El excedente dependerá del número de unidades que se fabriquen del nuevo modelo. Aunque ni Audi ni Seat han hecho previsiones, esperan que sean superiores a las del Q3, lo que paliaría o anularía el excedente. La voluntad de la marca española de VW, aseguran, es continuar contratando, como está haciendo ahora.
Sin embargo, la dirección de Seat ha comunicado a su comité de empresa que la producción del A1 será similar a la del Q3, lo cual es una mala noticia para la fábrica. 2015 ha sido el mejor año desde que se empezó a producir el Q3, con más de 130.000 unidades fabricadas. En total, han salido de Martorell 478.000 unidades de SUV.
Ante este escenario a dos años vista, el comité de empresa de Seat ha pedido que se adjudique algún otro modelo a la planta de la marca, para garantizar el empleo. Actualmente, además del Q3, se fabrican el Ibiza y el León, después de que en 2015 se dejara de hacer el Altea. La previsión para 2018 es que se siga produciendo la actual generación del León y la nueva del Ibiza, pero no hay nuevos lanzamientos previstos por ahora.
Las negociaciones del convenio, enturbiadas
La decisión de Audi, que ha empañado el futuro de Martorell, ha caído justo cuando la dirección de Seat y los representantes de los trabajadores están a punto de sentarse a la mesa de negociación del nuevo convenio, y amenaza de complicar el acuerdo. La semana pasada se constituyó la mesa, que preside Salvador Álvarez, director de relaciones laborales con el tripartito, y la semana que viene, el día 28, se reúne por primera vez.
El convenio de Seat venció el pasado 31 de diciembre pero tiene un año extra de vigencia para negociar el próximo. Sin duda el futuro de la fábrica a partir de 2018 será un tema central de las conversaciones. Los sindicatos aseguran que no negociarán el convenio sin saber las previsiones de producción, para asegurar el empleo, y quieren un convenio a cinco años que garantice carga de trabajo y que no haya despidos. Y eso pasaría, insisten, por un nuevo modelo para Martorell.