Jean-François Bossy, brazo ejecutor de los desahucios del fondo Blackstone
Encabeza la red societaria montada para rentabilizar los 3.800 millones invertidos en adquirir 41.000 viviendas, directamente o como acreedor de las hipotecas
Con la alfombra roja que le han puesto las administraciones públicas, la Sareb y el FROB, el gigante fondo de inversión estadounidense Blackstone ha empezado a mover los hilos para hacer rentable los 3.800 millones de euros invertidos en vivienda en España entre 2013 y 2014.
Un negocio que, en muchos casos, pasará irremediablemente por la necesidad de llevar a cabo desahucios masivos de inquilinos y propietarios que no pueden hacer frente a los pagos de la renta o del préstamo hipotecario.
Cambio de casero y de acreedor
Son más de 41.000 viviendas las que el fondo ha captado en varias operaciones, entre las que destaca la cartera de hipotecas sobre casi 38.000 casas adquirida en 2014 a Catalunya Caixa o los 1.860 pisos en alquiler comprados un año antes a la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo de Madrid (EMVS).
Como suele ocurrir en estos casos, muchos de los afectados no se enteran de que han cambiado de casero o de que su acreedor es otro. Son los que, afortunadamente para ellos, no tienen problema alguno para afrontar los pagos. Los que no lo hacen, enseguida son notificados de los cambios acaecidos.
Entramado de 13 sociedades
Evidentemente, no reciben una carta o una llamada telefónica directamente de Blackstone. El fondo, tanto en Madrid como en Barcelona, ha montado una tupida red de 13 sociedades a través de las que gestiona este vasto patrimonio inmobiliario.
Al frente de todas estas empresas figura como presidente Jean-François Bossy, el director financiero (CFO) de Blackstone Real Estate en Europa, junto a la directora de Operaciones (COO), Diana Hoffmann.
Bossy, economista de 40 años
Aunque el ex presidente del Círculo de Empresarios, Claudio Boada, es desde hace tres años el responsable del fondo en España, ambos técnicos –con el beneplácito del mandamás del negocio inmobiliario internacional de Blackstone, Jonathan D. Gray– tienen vía libre para tomar las decisiones que estimen oportunas.
Bossy es un economista de 40 años, graduado en 2000 por la Universidad de Lieja (Bélgica) que, antes de llegar a Blackstone en 2004, ejerció de auditor en Grant Thornton y KPMG. Siempre desde Luxemburgo.
Desde allí. Desde su despacho en el Gran Ducado, Bossy ha montado la red de empresas en las que ejerce como máximo responsable de la gestión de activos residenciales en España.
Madrid y Barcelona
En Madrid son siete las sociedades que Blackstone ha constituido entre octubre de 2012 y junio de 2014, y seis en Barcelona, en 2014, antes y después de comprar las hipotecas de Catalunya Caixa en julio del pasado año.
Las de la capital bajo el nombre de Fidere, completado con el añadido de Patrimonio, Comunidad, Vivienda, o Residencial. En Barcelona, el entramado inmobiliario de Blackstone se articula en torno a Anticipa y Chameleon (camaleón en inglés), ésta con varias sociedades bajo ese nombre principal.
Patrón societario
Todas las de Madrid están domiciliadas en un edificio de oficinas situado junto a la M-30, cerca de Atocha, mientras que en la Ciudad Condal casi todas se ubican en la calle de Aribau, a excepción de la inmobiliaria Anticipa –la que inmediatamente, tras comprar Blackstone las hipotecas de CatalunyaCaixa, sustituyó como plataforma vendedora a CX Inmobiliaria–, con sede en el polígono industrial Mas Mateu, en El Prat de Llobregat.
El patrón societario montado por Blackstone es similar tanto en Madrid como en Barcelona. Una misma actividad y varias sociedades, con capitales diversos, de entre 3.000 y 635.000 euros, con un socio único común que, a su vez, también lo es de una sociedad radicada en Luxemburgo.
En el caso de las empresas constituidas en la capital la pista final conduce en el Ducado hasta Spanish Residential Leasing Holdco, y en las de Barcelona la ruta del entramado lleva hasta Chameleon Reig Holdco. Hasta el despacho de Jean-François Bossy.