Foment amenaza a la Generalitat con abandonar el recuento patronal
Foment del Treball amenaza a la Generalitat con una batalla legal y con no presentarse al recuento de apoyos empresariales
Foment del Treball sopesa no presentarse al recuento de apoyos empresariales que ha ordenado este lunes la Generalitat para decidir la representatividad de las diversas patronales catalanas. Este recuento debe servir para asignar las cuotas patronales en las mesas de negociación.
Con contundencia, el presidente de Foment, Josep Sánchez Llibre, aseguró que sopesan no presentarse al recuento ordenado por la Generalitat para calcular la representación patronal. Advirtió de una batalla legal. Precisó que no rechazan un recuento siempre que se aborde con “criterios económicos” como la facturación de las empresas asociadas, el número de trabajadores, las exportaciones o su peso respecto al PIB catalán.
El Diario Oficial de la Generalitat de Cataluña (DOGC) publicó este lunes la orden de la Consejería de Trabajo por la que da el pistoletazo de salida al recuento. Este recuento se basa únicamente el número de empresas.
Sobre esta orden de la Generalitat, Sánchez Llibre recalcó que el recuento no se puede fundamentar únicamente en el número de sociedades afiliadas porque supone equiparar una empresa con 10.000 empleados con una Pyme o un autónomo.
Este criterio beneficia a la patronal de la pequeña y mediana empresa catalana Pimec que preside Josep González. Pimec se congratuló este lunes de que se inicie el recuento.
Sánchez Llibre reiteró que no renuncia a un acuerdo con Pimec para evitar el recuento. Añadió que tampoco rechaza un recuento si se modifica el decreto de la Generalitat, aprobado en tiempos del gobierno de Artur Mas, que se basa en el número de empresas afiliadas. Exigen la rectificación del mencionado decreto para que se incluyan “criterios económicos”. Indicó que el DOGC nunca publicó este decreto después de ser enmendado por una sentencia del Tribunal Supremo.
Foment saca pecho
Según Sánchez Llibre, Foment representa el 70% del PIB catalán, el 90% de las negociaciones patronales con los sindicatos, el 90% de las exportaciones o el 70% de las empresas adjudicatarias de obra pública por parte del Estado, La Generalitat y los ayuntamientos.
Sánchez Llibre insistió en que les ha “sorprendido negativamente” la publicación de la orden de la Generalitat porque es “arbitraria” e “injusta” por “vulnerar el principio de seguridad jurídica”.
Si la Generalitat no atiende las sugerencias de Foment, Sánchez Llibre anunció que iniciarán acciones jurídicas para impugnar la orden de la Generalitat. Esperan que la Consejería de Trabajo suspenda cautelarmente el recuento. Incluso sopesan no acudir a este proceso pese a que el plazo de un mes que les dio la Generalitat empezó este lunes.
Advertencias a la Generalitat
“La orden de la Generalitat lesiona los intereses de Foment y de sus empresas asociadas”, afirmó Sánchez Llibre. Advirtió que “tener en contra una institución como Foment no interesa a nadie”, aunque reconoció que a ellos tampoco les interesa.
Pimec exige la paridad patronal para cerrar el conflicto de la representatividad. El pasado mes de julio, los secretarios generales de Pimec, Foment y de la Consejería de Trabajo de la Generalitat firmaron un preacuerdo por el que estas dos patronales se repartían la representatividad a partes iguales. Este preacuerdo se firmo cuando al frente de Foment estaba Joaquim Gay de Montellà.
Sánchez Llibre no aceptó este acuerdo cuando tomó las riendas e Foment el noviembre pasado. Asegura que nunca han pactado con Pimec una representatividad del 50%. Aseguró que nunca negociarán la paridad. La última oferta que puso Foment sobre la mesa quedarse una representación del 65% (que incluiría a Fepime) y que el 35% restante sea para Pimec. En la actualidad, Foment ostenta el 65%; Fepime, el 15%; y Pimec, el 25%.