Eroski se enfrenta ahora a la banca que provocó su preconcurso en 2015
El grupo de distribución vasco tiene que validar la refinanciación alcanzada con las grandes entidades, que acumulan el 75% de la deuda
Si Eroski ya completó la parte más dura de la refinanciación de la deuda, le queda ahora el tramo más farragoso de la negociación. Las conversaciones con los principales acreedores se prolongaron por más de año y medio y, tras firmarse un acuerdo la semana pasada, ahora es el turno de las entidades que aglutinan el 25% del pasivo. De no llegar a un pacto, la cadena de supermercados deberá declarar el preconcurso de acreedores.
Fuentes financieras explican que las reuniones con las entidades ya comenzaron. “Eroski extenderá el acuerdo al resto de entidades financieras acreedores y confía en culminar todo el proceso en los próximos meses”, avanzó la compañía presidida por Agustín Markaide. Entre los bancos de este segundo escalón destacan, Liberbank, Bankoa, Abanca e ING, avanzó El Correo.
Así, contar con un acuerdo con el 75% del pasivo financiero –en manos de Banco Santander, BBVA, Caixabank, Banc Sabadell y Bankia— servirá como argumento de peso para convencer a las entidades con menor peso. Sin embargo, tienen capacidad para dilatar la firma definitiva del pacto.
De no adherirse voluntariamente a la refinanciación, Eroski podría hasta verse obligada a presentar el preconcurso de acreedores para que el juez homologara el sí al nuevo calendario de pagos. El recurso ya tuvo que ser utilizado por el grupo vasco en la anterior refinanciación, en 2015, precisamente por culpa de entidades con escaso peso.
Hace cuatro años, hasta diez pequeños acreedores se mostraron disconformes con el acuerdo entre banca y empresa, por lo que la cadena de supermercados tuvo que acudir a los juzgados para zanjar el acuerdo.
A pesar de contar entonces con el favor del 95% del pasivo, hubo incluso tres bancos que recurrieron la decisión del magistrado. La francesa Natixis, el irlandés KBC Bank y el alemán Deutsche Hypothekenbank se postularon contra la resolución al considerar que se les exigía «un sacrificio desproporcionado» al quedar «discriminados» frente al resto de los acreedores.
Eroski: dos refinanciaciones en menos de un lustro
Eroski logró refinanciar 1.540 millones de euros después de año y medio de negociaciones con la banca al ver como se acercaba la fecha de caducidad del acuerdo alcanzado en 215. La compañía deberá afrontar desinversiones en los próximos años. La intervención del Gobierno del PNV del lehendakari Iñigo Urkullu fue para el acuerdo final.
Eroski llegó a pedir una condonación de hasta 500 millones de euros de la deuda. Sin embargo, esta propuesta fue rechazada de pleno por Banco Santander, BBVA, CaixaBank, Sabadell y Bankia, los mayores acreedores del grupo de distribución. De hecho, la entidad presidida por Ana Botín llegó a exigir por escrito al grupo vasco el cumplimiento de un plan de reestructuración después de constatar que las conversaciones amistosas iniciadas en septiembre de 2017 no daban sus frutos.
Finalmente, la empresa logró salvar filiales como Caprabo, Vegalsa —la filial de Galicia—, la división de Baleares (la más rentable) y Forum Sport, la cadena de tiendas de deportes creada con varios exdeportistas de élite como Miguel Induráin. Sí las agrupará en sociedades «con el fin de optimizar su resultado y recursos». Además, Eroski celebra que el actual acuerdo elimina la necesidad de mercantilizar la cooperativa.
El origen de los problemas de Eroski radica en la compra de Caprabo entre 2007 y 2012. La empresa vasca pagó 1.125 millones de euros, pero las ventas de la cadena con base en Cataluña se han desplomado cerca de un 50% desde la adquisición.