Elon Musk comete su peor error al frente de Tesla

Tesla presentó sus resultados del primer trimeste de 2018 la noche del miércoles. Por lo general, las cifras superaron las expectativas, y Elon Musk tenía la oportunidad de salir airoso de otro escrutinio público pero, a la hora de asumir los números frente al público, el fundador y consejero delegado de la compañía se tropezó con su propio ego y cometió el peor error ante los analistas: menospreció a los escépticos y, como consecuencia, Tesla se desplomó en bolsa.

Poco más de media hora después de inciada la conferencia de resultados con analistas, inversores y periodistas, Musk se lió. «¡Siguiente!», dijo a un reportero que iba a media pregunta. El periodista estaba interesado en el capital necesario para que Tesla pueda completar sus objetivos, pero al fundador poco le importó responder. Cuando un analista le preguntó cuántos Model 3 se han entregado, Musk dijo que estaba cansado de las preguntas «secas» y «aburridas».

Incluso cuando Deepak Ahuja, su propio director financiero, comentó que las baterías de Tesla eran las «mejores de la clase», Musk lo interrumpió para comentar que son las únicas buenas baterías. «No es una clase», dijo. «Sí, somos los mejores. Disculpa», respondió su compañero. «Las mejores baterías en una clase de uno», agregó Musk, para no dejar atisbo de duda.

Elon Musk recomendó no invertir en Tesla a quienes están preocupados por la volatilidad de la empresa

Pero el valor de Tesla en bolsa empezó a caer cuando Musk, evidentemente cansado de las preguntas de los periodistas y los analistas, le dio la palabra a un youtuber que había hecho una campaña online para participar en la conferencia de Tesla. El youtuber, Galileo Russell, dio paso a una entrevista de unas diez preguntas que tenían poco o nada que ver con los resultados trimestrales de la empresa.

En ese momento, Musk se mostró encantado de estar ahí, pero el daño ya estaba hecho: además de llamar «aburrida» a la misma prensa que promociona de a gratis sus productos y sus promesas incumplidas, el fundador de Tesla recomendó no invertir en su compañía a cualquier inversor preocupado por la volatilidad. Y los inversores tomaron nota: Tesla ha descendido cerca del 7% desde la conferencia.

Entre sus muchas declaraciones polémicas de la noche, Musk dijo que «es increíblemente irresponsable que cualquier periodista con integridad escriba un artículo que lleve a las personas a pensar que la autonomía es menos segura, porque las personas podrían apagarla y morir». El empresario terminó diciendo que los accidentes de Tesla son más culpa de los conductores que de su engañosamente llamado sistema de autopiloto.

Tesla perdió 785 millones en tres meses

La metida de patas de Musk terminó por sepultar lo verdaderamente importante: los resultados del primer trimestre del año. El fabricante de automóviles eléctricos de lujo sumó pérdidas netas de 785 millones de dólares, un 97,5% más que en el mismo periodo del año anterior. Por otro lado, Tesla tuvo ingresos de 3.408 millones de dólares en los primeros tres meses del año, un 26,4% más que hace un año.

Los gastos operativos de la compañía aumentaron un 13,8%, para un total de 1.053 millones de dólares, mientras que las ventas de automóviles también crecieron, un 25,8%, con ingresos de 2.561 millones de dólares.

Los atrasos en las entregas del Model 3 siguen presentes. De las 5.000 unidades semanales que Musk prometió, lo mejor que logró la empresa fue producir 2.000 unidades a la semana durante tres semanas consecutivas. Aún así, Musk volvió a prometer mejores cifras de producción: dijo que su objetivo es conseguir una producción de 10.000 automóviles a la semana.

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