El Liceu recibe la primera inyección de capital de la Generalitat

Las cuentas del Gran Teatro del Liceu han recibido un balón de oxígeno. La Generalitat de Catalunya ha realizado el primer traspaso del compromiso de inversión con la institución de la ópera en Barcelona que anunció a mediados de mayo. La inyección económica llega a los 377.000 euros.

La dirección del teatro, encabezada por Roger Guasch, usará la aportación para proseguir con la aplicación del plan estratégico. En estos momentos, la institución tiene dos frentes abiertos. Intenta cerrar la refinanciación de un pasivo de 15,7 millones de euros a unos tipos ventajosos para sus intereses (el pool bancario incluye a CaixaBank, Banco Santander, BBVA, Banc Sabadell y la entidad pública Institut Català de Finances, ICF); y, por otro lado, negocia con los trabajadores la próxima reestructuración que se aplicará. El gobierno catalán también interviene en esta última parte, como mediador.

Christina Scheppelmann, directora artística

El apartado económico del plan estratégico de Guasch empieza a tomar forma, igual que los compromisos artísticos de la institución. La comisión técnica ha encontrado la persona que recogerá el testigo de Joan Matabosch en la dirección artística del teatro. Será Christina Scheppelmann, actual directora general y responsable de las obras que de la Royal Opera House de Masqat (Oman), la mayor institución musical del Oriente Medio.

Su candidatura se ha impuesto a la de otros nueve perfiles que se han analizado para encargarse de la programación del teatro de la ópera catalana. El nombramiento de Scheppelmann se aprobará formalmente en la comisión ejecutiva del Liceu que se reunirá a finales de junio. Ya ha recibido la bendición del Ministerio de Educación y Cultura, el Departamento de Cultura de la Generalitat, el Ajuntament de Barcelona y la Diputación de la capital catalana.