El entramado de Jenaro García, más allá de Gowex
Controla la sociedad ancla, Cash Devices, dos opacas inmobiliarias, una gestora de capital y una empresa de soluciones informáticas
Al final, por un lado o por otro, en todo entramado societario que se precie siempre aparecen los negocios inmobiliarios. En el caso de Jenaro García Martín, protagonista del último escándalo financiero al reconocer que las cuentas del proveedor de wifi Gowex eran todo un fraude, también.
Aunque, en este caso, se trate de unos negocios un tanto particulares y, aparentemente, con poco peso. Según se puede comprobar en el Registro Mercantil, García Martín constituyó la sociedad La Terraza Trading Asset Management, en marzo de 2008, al objeto de promover y construir inmuebles, y la liquidó poco más de dos años después en noviembre de 2010.
En esta empresa García Martín solo figuró como liquidador. Lo hacía como socio único Ashby Malloy Glenda. Un ciudadano estadounidense dedicado a actuar de agente de actividades financieras.
Sociedades en la sede de Gowex
El mismo que, en esas mismas fechas, en mayo de 2008, también fue nombrado como socio único de Iberamerican Capital Partnerts. Una sociedad, domiciliada en la sede de Gowex, en el número 21 del paseo de la Castellana de Madrid. Esta empresa no se ha liquidado, pero se desconoce el alcance de su actividad, ya que solo depositó las cuentas del primer ejercicio, las del año 2008.
También resulta sorprendente que Jenaro García se metiera a promotor inmobiliario la pasada Navidad al crear la empresa Optiges Inversiones Inmobiliarias, con un capital de 60.000 euros. Figura como administrador único y, como socio único, Cash Devices, su empresa ancla a través de la que controla la cuarta parte de Gowex. Además de la actividad inmobiliaria, Optiges tiene como objeto social la tenencia de participaciones en el capital de otras entidades, residentes o no en territorio español.
Demolición de un mercado en Almuñécar
Seis meses en los que Optiges no ha tenido oportunidad de tener mucha actividad, pero sí de sembrar la polémica por un fallido contrato del Ayuntamiento de Almuñécar. En esta localidad granadina, la oposición ha pedido explicaciones acerca de las negociaciones mantenidas entre los responsables municipales, con la alcaldesa popular Trinidad Herrera al frente, y Jenaro Martín, de cara a la licitación del concurso para demoler el antiguo mercado y construir uno nuevo. Al final, la licitación no se llevó a término y el contrato de 12 millones no se llegó a otorgar.
Otra empresa controlada por Jenaro Martín, como administrador único desde hace un año, es Ideup Desarrollos Tecnológicos. Muchas de las páginas web de instituciones públicas y de empresas privadas llevan su firma. En 2012, último ejercicio en el que presentó las cuentas, reconoció unos ingresos de 2,26 millones de euros y obtuvo unos beneficios de casi 190.000 euros. Contaba entonces con una plantilla de 38 empleados –casi todos, analistas informáticos– y debía unos 470.000 euros a Hacienda y a la Seguridad Social.
Sociedades opacas
Más opaca resulta Cash Devices, la empresa que García Martín puso en marcha en 1996 tras regresar de Estados Unidos. Oficialmente se dedica a la elaboración, distribución y venta de instalaciones de equipos informáticos y a servicios técnicos de ingeniería, pero no cuenta con ningún trabajador. En 2012 solo facturó 70.000 euros, el triple que un año antes, pero, en cambio, obtuvo unos beneficios superiores a los 680.000 euros, gracias a los cerca de 500.000 euros apuntados como ventas del inmovilizado y otros 307.000 contabilizados como otros ingresos financieros.
Por último, LET’S Gowex, la empresa que aglutina la cartera de acciones, adquiridas por particulares, fondos y sicav. A lo largo de esta semana, las gestoras de diez de estas sociedades de inversión han reconocido las pérdidas ocasionadas por la compra de activos de Gowex. No son de mucha enjundia. Las hasta ahora reconocidas no superan, en ningún caso, los 200.000 euros.
Lista de afectados
Entre los afectados, family offices de Fernando de Asúa y Francisco Luzón, directivos ligados al Banco Santander; Alonso Álvarez de Toledo y Urquijo, marqués de Villanueva de Valdueza, que ha reconocido un agujero de 132.763 euros a través de su sicav Peña Cabra, o Bernardina Villanueva Zaccagnini, al frente de la sicav Ditrima Inversiones y de la inmobiliaria madrileña Grass 2001, con pérdidas de 197.446 euros al poner a 0 las 24.930 acciones de Gowex valoradas cada una en 7,92 euros.