El Corte Inglés gana más pese a la caída de sus centros
La compañía cierra el semestre en el que cambió de presidente con un Ebitda de 355 millones, el 4,4% más, pero un descenso de los centros comerciales
El Corte Inglés exprime sus márgenes para paliar la caída de las ventas en los centros comerciales. El gigante de la distribución cerró el primer semestre de su ejercicio fiscal –entre marzo y agosto— con una subida del beneficio bruto del 4,4% hasta 335 millones de euros. Además, logró elevar la facturación a 7.585 millones (+0,4%) a pesar del declive de sus establecimientos, que redujeron el 0,6% las ventas.
La compañía que preside Jesús Nuño de la Rosa mejoró los márgenes “en todas las áreas del grupo gracias a la nueva gestión”, un claro dardo al anterior presidente, Dimas Gimeno, que fue forzado a abandonar la empresa durante el pasado mes de junio, con más de la mitad del trimestre ya transcurrido.
La empresa lamenta una rebaja de las ventas de retail debido a “factores climatológicos”. De este modo, los 6.053 millones de euros que generó en el primer semestre de 2017 se quedaron en 6.017 millones, el 0,6% menos.
La división textil de El Corte Inglés cayó el 1,5% en un semestre con un clima desfavorable
La caída fue más abrupta en la división de textil, donde la reducción fue del 1,5%, con segmentos como la moda femenina, que cae a doble dígito en el estreno del segundo semestre con la nueva campaña Woman. “El sector cayó el 3,6%, según datos de la patronal madrileña Acotex”, matiza la empresa.
«En el área de retail destaca el crecimiento del área de hogar y cultura/ocio, así como la evolución positiva de Supercor y los grandes almacenes de Portugal«, celebran.
El resto de departamentos ofrecieron luces y sombras. Viajes creció el 4,6% hasta los 1.565 millones de euros y Seguros se alzó el 9,5% hasta los 104 millones. Sin embargo, Tecnologías de la Información cayó el 2,8% hasta los 308 millones de euros.
El Corte Inglés: tijeretazo a la deuda
Con una deuda de 3.999 millones hace un año, El Corte Inglés logró calmar su pasivo gracias a una refinanciación de sus préstamos con la banca, que además redujo sus gastos financieros en 18 millones de euros, y la venta de edificios «no estratégicos» por valor de 212 millones de euros. Gracias a ambas medidas, el déficit alcanza ahora los 3.652 millones, una reducción del 8,6%.
De la mano de este descenso y el ligero incremento de la cifra de negocios, el ratio entre la deuda y el Ebitda pasó de ser de 3,3 veces a 3,1 veces.