El coronavirus lastra a Naturgy por la caída del gas y la electricidad

El coronavirus hizo mella en las cuentas de ​Naturgy, que ganó 334 millones de euros hasta junio. La cifra supone una reducción de las ganancias del 43,6% respecto al mismo semestre de 2019 y el motivo no es otro que los efectos de la crisis sanitaria en el sector energético: la caída de la demanda de luz de los clientes y el desplome de los precios de gas y electricidad. La situación ha llevado a la compañía a anunciar que en otoño actualizará los objetivos de su plan estratégico hasta 2022.

La multinacional energética ha avanzado en un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que «la desaceleración de la actividad económica ha tenido un impacto significativo en la evolución de la demanda de electricidad y gas a nivel mundial y, por lo tanto, en las diversas regiones donde opera el grupo».

En concreto, en España la demanda de electricidad cayó un 8,5% y la del gas un 9,7% cayó durante el primer semestre. También bajó en Latinoamérica, donde la demanda de electricidad fue un 3,7% menor y la del gas se rebajó un 13,9% en comparación al año anterior.

En cuanto al beneficio bruto de explotación (ebitda), alcanzó los 1.870 millones hasta junio, un 14,1% menos que en el primer semestre de 2019.

Liquidez de más de 10.000 millones

Pese al impacto de la pandemia, la multinacional que lidera Francisco Reynés resalta que tiene una posición de liquidez que alcanza los 10.006 millones. Esta situación permite a la compañía «afrontar cómodamente sus compromisos financieros» y «estar en disposición de poder capturar las oportunidades de crecimiento que puedan surgir», según remarca en su comunicado.

No obstante, Naturgy no hace estimaciones hasta el momento sobre el impacto de la crisis del coronavirus en sus ganancias en 2020. Su defensa es que el escenario es aún demasiado incierto, aunque este miércoles ha anunciado que en el último trimestre del año celebrará un Capital Markets Day para explicar en qué punto está «su siguiente fase de transformación».

La cotizada española precisa que «profundizará en la estrategia industrial para la creación de valor en cada uno de sus negocios y actualizará así sus objetivos, reafirmando sus compromisos con el dividendo», así como en el ámbito medioambiental, social y de gobierno corporativo.

También indica qué otros objetivos se ha propuesto: seguir reduciendo el perfil de riesgo de la compañía mediante la rotación de activos, establecer relaciones beneficiosas para ambas partes con los reguladores y renegociar los contratos de suministro de gas. 

A este respecto, la compañía concreta que ya ha logrado «avances en la terminación anticipada de contratos  —de aprovisionamiento de gas — a largo plazo por un volumen anual de 20 Teravatios hora (TWh) y espera nuevos acuerdos durante la segunda mitad del año» con otros suministradores para modificar acuerdos en volumen y en precio.