El auge de las franquicias dudosas: tiendas que venden a pérdidas y heladerías fantasma
Un esquema rentista hace que los franquiciados pierdan más dinero mientras más venden
Las franquicias se han convertido un excelente negocio pero, en la mayor parte de los casos, sólo para el franquiciador. La última exposición de franquicias en Madrid, Expofranquicias, celebrada la semana pasada es una muestra de la gran cantidad de empresas de todo tipo de se han lanzado al negocio.
Una heladería italiana hacía una oferta agresiva: 25.000 euros la franquicia, pero con rebajas de 9.000 euros para los primeros tres franquiciados. La mayor parte de visitantes, atraídos por la ganga, se decepcionaban al comprobar que la franquicia realmente no incluye nada a excepción de una maqueta. La marca, que apenas tiene una tienda en Italia, sólo se comprometía a poner en contacto al franquiciado con el distribuidor de helados en España.
“Es una tomadura de pelo. Da la impresión de que algunos comerciantes que les va más o menos bien quieren enriquecerse rápidamente vendiendo franquicias para negocios con dudosa viabilidad”, explica José Luis Perada, un consultor de franquicias en Canarias asistente al encuentro.
Los supermercados a pérdidas
Las franquicias de yogur, helados, centros de depilación y gimnasios crecen al mismo ritmo que las asociaciones que denuncian un timo en muchas de las marcas. Aseguran que, a pesar de lograr una enorme facturación, operan generalmente con pérdidas.
Es el caso de los supermercados Dia que ya cuenta con una asociación de 80 franquiciados críticos con el modelo de negocio que los ha empobrecido. “La empresa nos obliga a vender muchos productos a pérdidas, algo que está prohibido por ley. Es una sangría porque mientras más facturamos, más dinero perdemos. Sólo ganamos 10 céntimos por botella de Coca-Cola de dos litros, pero como el cliente venga con un cupón de descuento, la ganancia es cero”, explica Francisco García, presidente de la asociación de franquiciados de supermercados Dia.
Arruinados con facturación millonaria
La asociación recibe cada día correos electrónicos de franquiciados que se quejan del esquema. Este miércoles recibieron una petición de adhesión de una franquiciada en Pontevedra. Factura 1,8 millones de euros al año y está arruinada. Dia, que lucha por lograr mayores cuotas de facturación, asegura que los franquiciados que se quejan son escasos y que la mayoría son exitosos.
Pero no es el único caso. Los afectados por las franquicias de Carrefour también demandaron hace dos años por incumplimiento del contrato y por obligarlos a vender a pérdidas.