DIA se muda por etapas a Luxemburgo
El grupo de Mikhail Fridman irá trasladando activos y unidades de negocio a este país, con un modelo tributario más atractivo que España
El grupo de supermercados DIA activará tras las uvas que den comienzo a 2020 un proceso dirigido a transmitir sus principales activos y unidades de negocio a una serie de filiales que estarán participadas por sociedades con sede en Luxemburgo, según ha explicado en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La compañía propiedad de Mikhail Fridman insiste en que este movimiento de «filialización» ya fue anunciado hace meses como parte del acuerdo de refinanciación con las entidades acreedora. El proceso se hará de forma «secuencial» desde principios del próximo ejercicio y será «complejo». Por lo pronto, se realizará a lo largo de los primeros meses de 2020.
Una vez completada la operación, sus principales activos y unidades de negocio habrán sido transmitidos a una serie de filiales creadas ex profeso y que estarán «directa e indirectamente participadas por distintas sociedades luxemburguesas intermedias, las cuales, a su vez, estarán íntegramente participadas por DIA de forma directa o indirecta, según el caso», recuerda EFE.
Desde DIA apuntan a que el traslado afectará a «todos los activos, pasivos, participaciones societarias, contratos y empleados que conforman el negocio minorista y mayorista español, el negocio extranjero y los servicios centrales de DIA», aunque habrá algunas excepciones.
DIA, ¿movimiento de optimización fiscal?
De acuerdo con fuentes consultadas por EFE, esta medida no tendrá efectos a la hora de pagar impuestos en los diferentes países donde opera (Argentina, Brasil, España y Portugal).
El acuerdo alcanzado con los acreedores también incluye la pignoración -es decir, la congelación como garantía- de «acciones o participaciones, cuentas bancarias y derechos de crédito de las filiales involucradas en la operación». Además, se transmitirá una parte de la deuda de DIA a estas mismas filiales.
El proceso de «filialización» vio luz verde en la junta de accionistas del pasado mes de agosto, con el magnate ruso Mijaíl Fridman ya como máximo accionista tras el éxito de su opa, que le permitió aumentar su participación hasta superar el 69 % del capital.
Entonces la firma concretó que transmitiría a las citadas sociedades «todos los bienes inmuebles propiedad de DIA en España», locales comerciales que conjuntamente representan un 58 % de su Ebitda restringido, así como las participaciones del grupo en las filiales brasileña, argentinas y portuguesa «en la medida en que sea viable desde un punto de vista legal, fiscal y regulatorio».