Colonial pierde fuelle en su retorno al IBEX
Colonial vuelve a cotizar en el IBEX once años después de abandonar el principal índice de la bolsa española y cierra plano pese a un buen inicio de jornada
Once años después, Colonial volvió este lunes al club de las 35 principales cotizadas de España, pero no lo hizo como le hubiera gustado. Tras toda la sesión en verde, y en máximos históricos, terminó la primera sesión en el IBEX cerrando en plano, por lo que volvió a quedarse a las puertas de los 3.000 millones de euros de capitalización.
El Comité Asesor Técnico del IBEX decidió el 7 de junio pasado que Colonial volviera al índice en sustitución del Popular, excluido ese mismo día por su compra por parte del Santander. La inmobiliaria presidida por Juan José Brugera ya era favorita para entrar si había alguna salida, y la crisis del Popular le abrió la puerta de par en par, pero a partir del 19 de junio.
La compañía, que ultima su cambio a socimi, volvió al IBEX once años después de dejar el selectivo y la bolsa. Un mes de junio, de 2006, tras una opa de exclusión de Portillo, Colonial dejó el mercado de valores. Ahora vuelve al IBEX tras superar una dura crisis, con una estructura que nada tiene que ver con la de hace una década, con inversores internacionales estables y centrado en el mercado de oficinas de Barcelona, Madrid y París.
Colonial empezó en el IBEX en verde, rozando una subida del 3%, pero terminó deshinchándose
La inmobiliaria que dirige Pere Viñolas retornó al índice principal de la bolsa española con alegría, llegando a subir casi un 3% durante la mañana de este lunes. Durante la tarde, la euforia fue desapareciendo y las subidas mitigándose, hasta terminar cerrando plano, en los 7,64 euros por acción. Desde inicios de año, la compañía acumula una subida en bolsa del 16% y vale ya 2.998 millones de euros.
Colonial celebrará en diez días su junta de accionistas, en la que aprobará su transformación en socimi. Este cambio, que no se trasladará en “ningún cambio en la estrategia corporativa de la empresa ni en el plan de negocio», le reportará un impacto positivo de 72 millones en los fondos propios.
Pero el verdadero beneficio lo encontrará cuando busque inversores. Gracias al cambio de régimen, podrá beneficiarse de una fiscalidad más favorable, como tienen este tipo de compañías en la mayoría de países de Europa, lo que les facilitará convencer a los inversores para apostar por sus proyectos.