Cataluña no levanta cabeza: sigue la fuga de empresas
Dos años después del referéndum ilegal del 1-O, Cataluña todavía pierde más empresas de las que capta
No se logra aún el balance en la captación de empresas en Cataluña. Más de dos años después del referéndum ilegal del 1-O, las noticias sobre los efectos de la inestabilidad política y social en la comunidad autónoma se siguen acumulando. Este lunes, se ha sumado una más: unas 440 empresas trasladaron su sede social fuera de la comunidad durante el primer semestre de 2019. Se suman a las miles que lo han hecho estos años.
Pese a que entre enero y junio de este año se establecieron en Cataluña 324 empresas, la cifra deserciones arroja un saldo negativo de 116 empresas. Con todo, medio centenar de las compañías que cambiaron su sede social entre 2017 y 2018 regresaron este año, insuficiente para revertir la situación. En octubre, el Colegio de Registradores de España calculó que, entre el 1-O y ese mes de 2019 casi 5.500 empresas habían abandonado.
Los datos del primer semestre del año los ha hecho públicos la Federación de Empresarios de la Pequeña y Mediana Empresa de Cataluña (Fepime). La presidenta de la entidad, Maria Helena de Felipe, matizó en un acto que el saldo negativo ha sido «muy inferior» al registrado en el primer semestre de 2018, cuando la cifra de compañías espantadas por la situación política superó los dos millares.
El hecho de que 50 empresas que en su momento trasladaron su sede social a Madrid o Valencia ahora se sientan animadas a volver a Cataluña es señal de «confianza para los mercados», según Fepime. También ha ayudado que se registraron casi 14.000 nuevas sociedades mercantiles hasta septiembre, un 2,82% más que hace un año, y se disolvieron casi 1.500, un 2,24% menos en términos interanuales.
Para De Felipe estos últimos datos son dignos de celebrar, porque en el conjunto de España la tendencia ha sido la contraria: la creación de empresas ha caído un 1,86% y la disolución ha crecido un 1,57%. «Son datos esperanzadores y creo que más empresas irán volviendo», ha manifestado la presidente de Fepime.
Las preocupaciones de las pymes catalanas
La federación también ha detallado las principales preocupaciones de las pymes catalanas en estos momentos, ante la leve recuperación de la confianza. La falta de mano de obra cualificada (un 267% más desde 2014) y la dificultad de las empresas más pequeñas para retener el talento son dos de las cuestiones más acusadas por los empresarios.
«Nos faltan programas de formación. Si no los tenemos, las pymes nunca podrán ser competitivas», dijo De Felipe. Además, ha criticado el acceso a la financiación: «No queremos subvenciones, pero sí incentivos económicos y reducciones impositivas para que podamos asumir los costes de una estrategia de comercio transfronterizo y para el lanzamiento de nuestros productos y servicios», añadió.
La patronal indicó que las operaciones de crédito nuevo a empresas cayeron un 6,32% en el último año respecto a 2018 en las operaciones de menos de 250.000 euros, un 1% en las operaciones de 250.000 euros a un millón, y crecieron un 35,7% en las operaciones superiores al millón.
El regreso de GM Fuel dispara las ventas
Pese a la fuga de compañías y el saldo negativo en la constitución empresarial, Cataluña cerró el primer trimestre del año con el mayor saldo de ventas de España: 1.048,8 millones de euros, según Fepime. El regreso de dos empresas del grupo petrolero GM Fuel es el catalizador de las ventas, con un volumen de negocio anual de 700 millones. «Esto ha disparado las ventas», explicó De Felipe.