La puerta de salida de Caixabank: más de 8.000 personas en seis años
Caixabank y los sindicatos llegan a un acuerdo para reducir la plantilla en 2.023 empleados en la que es su octava reestructuración desde 2013
Más de 8.000 despidos en seis años. Ese ha sido el resultado de los distintos procesos de recorte de personal que ha acometido Caixabank desde 2013. El último, que supone la octava reestructuración en ese tiempo, se ha firmado este mismo miércoles: tras cuatro meses de negociaciones con los sindicatos, la entidad prescindirá de 2.023 empleados.
El proceso se llevará a cabo a través de prejubilaciones y salidas voluntarias, como ha intentado hacer la entidad en todas las ocasiones anteriores. Los recortes van vinculados al cierre de 793 oficinas anunciado el año pasado. Con la reducción de personal, esperan ahorrar unos 190 millones anuales.
Entre las propuestas acordadas, se encuentran indemnizaciones del 57% del salario hasta los 63 años para personas nacidas antes de 1961 y hasta 1965 que acepten apuntarse al ERE voluntariamente, es decir, que sean ahora mayores de 54 años. Los trabajadores pueden adherirse de manera voluntaria hasta mediados de junio de 2019.
Resumen de parte del acuerdo final del ERE de Caixabank. Fuente: UGT
A los nacidos en 1966 y 1967, que tienen 52 o 53 años, se abonará ese mismo porcentaje del salario durante ocho anualidades y se les pagará el convenio especial de la Seguridad Social hasta los 63 años, al tiempo que recibirán una prima de 38.000 euros.
Por su parte, los menores de 52 años recibirán una indemnización de 45 días por año trabajado con un mínimo de 36 meses y un máximo de 42, así como un prima de entre 13.000 y 23.000 euros. El ERE no afecta ni a Barcelona, Teruel ni a los servicios centrales del banco.
Caixabank calcula que este ERE costará unos 890 millones de euros, por debajo del los 1.000 millones que estimaron fuentes financieras. La factura de los recortes de los 8.100 empleados que se han despedido desde 2013 llega a los 3.000 millones.
Ocho procesos de reestructuración en seis años
Con este nuevo proceso, Caixabank lleva ocho procesos de reestructuración de plantilla desde 2013. Más de uno por año de media. Estos comenzaron cuando compraron Banco de Valencia y Banca Cívica. Tras la adquisición, la entidad tuvo que eliminar duplicidades. Así, ese año llevó a cabo un gran ERE que supuso 2.600 salidas y le costó 785 millones.
Lo mismo ocurrió en 2014, tras la compra del negocio de Barclays en España. En este caso pactó cerca de 1.000 bajas más, que se ejecutaron la primera mitad de 2015. Finalmente, salieron 968 trabajadores, lo que costó 187 millones. Ese mismo año, en el segundo semestre, hubo 700 bajas incentivadas más, cuya factura fue de 284 millones.
En 2016 hubo dos reestructuraciones: 371 prejubilaciones y 386 recolocaciones, con un coste de 281 millones de euros. Al año siguiente, la entidad que dirige Gonzalo Cortázar prejubiló a 960 empleados más en dos procesos que sumaron unos costes de 455 millones.
Desde entonces, han salido 5.985 empleados del banco, que siempre ha buscado el acuerdo con los sindicatos. Con los del nuevo proceso, los despidos —incluyendo bajas incentivadas y una parte importante de prejubilaciones— superarn los 8.100.
No obstante, hay que tener en cuenta que con la adquisición de estos negocios a lo largo de los años, Caixabank ha ido aumentando su plantilla.