Cabify ya tiene rival en Barcelona (y no es Uber)
Social Car lanza en Barcelona su primer servicio de VTC, pero aplicará los 15 minutos de espera en todos sus viajes
Un nuevo actor irrumpe en escena dentro del sector de los vehículos de alquiler con conductor (VTC), marcado por el largo conflicto de Uber y Cabify con el taxi. Se trata de Social Car, la startup catalana de Mar Alarcón, que acaba de anunciar que operará como plataforma con 250 coches en Barcelona y será rival de Cabify, que hace apenas un mes anunció a su regreso en la capital catalana.
El servicio estará disponible desde este martes y se ajustará literalmente a la polémica normativa aprobada en enero por la Generalitat. Es decir, obligará a contratar cada servicio con 15 minutos de antelación, a diferencia de Cabify, que lo hace solo en el primer viaje.
Social Car es una startup que nació en 2011 en Barcelona, momento desde el que ha crecido hasta operar en más de 600 ciudades por toda España. Ya está presente en las más grandes y ha alcanzado 250.000 usuarios y 20.000 vehículos registrados, tanto de propietarios individuales como de flotas.
Entre todos sus servicios, la plataforma, que durante el pasado año facturó cerca de tres millones de euros, ofrece la reserva inmediata en Barcelona y Madrid con unas 400 unidades, así como renting a largo plazo y compra-venta.
Social Car está participada por el RACC y el fondo de capital riesgo Cabiedes & Partners, así como por varios business angels del sector como Pau Serracanta, director general de Dorna Sports, y Vincent Rosso, cofundador de Blablacar.
Social Car, rival de Cabify, no busca ningún conflicto con el taxi
“Nuestra entrada en los VTC es un paso más en la apuesta por ser una plataforma de movilidad, para que sea más sostenible, a partir de la innovación y la tecnología”, explica Mar Alarcón. La fundadora explica que la aplicación móvil está descargable desde este lunes tanto para dispositivos Android como para iOS y está preparada indistintamente para los VTC y los taxis.
“No se busca ningún conflicto, sino todo lo contrario; los taxistas interesados en trabajar con nosotros pueden incorporarse desde ya mismo”, añade Alarcón, una de las empresarias de referencia en el ecosistema emprendedor.
Social Car se convierte ahora en rival de Cabify, que opera desde hace un mes en Barcelona. La compañía opera con pocos vehículos VTC pero su objetivo es comerse la mayoría de cuota de mercado aprovechando que Uber ha abandonado la ciudad y no tiene intención de volver.
La compañía española utiliza los vehículos de Prestige and Limousine, uno de los mayores tenedores VTC en España. Además, el pasado viernes anunció un nuevo acuerdo estratégico, al sellar una alianza con Rosauro Varo, otro de los grandes empresarios del sector.