Bruselas denuncia a España por el agujero de las ayudas a la TDT
El Estado sólo ha recuperado 5,5 de los más de 300 millones con los que subvencionó la expansión de estos canales en zonas remotas del país
Apenas 5,5 millones de un total de 303,8 millones de euros en ayudas ilegales. Este es el dinero recuperado hasta ahora por España de las subvenciones otorgadas para la expansión de la televisión digital terrestre (TDT) en Castilla-La Mancha y otras zonas del país, declaradas irregulares por la Comisión Europea (CE).
Ante este panorama, Bruselas ha decidido llevar al estado español ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Además de no recuperar el grueso del dinero, las autoridades comunitarias denuncian que, desde su primera sentencia, España no ha suspendido los pagos para la operativa y mantenimiento de los canales de la TDT en estos territorios.
La Comisión declaró en 2013 y 2014 que las ayudas concedidas expansión de la televisión digital terrestre (TDT) en zonas remotas del territorio español y de la comunidad manchega, eran incompatibles con las normas europeas y la obligó a recuperar, respectivamente, 260 millones de euros en el primer caso y 43,8 millones en el segundo.
«Las autoridades españolas solo han recuperado una pequeña fracción de la ayuda», señala ahora la Comisión. Apenas 5,5 millones de los 260 que debían por la decisión referente a España y nada hasta el momento de la cantidad prevista en el caso de Castilla-La Mancha.
«Distorsión del mercado»
La Comisión subrayó que «como resultado del retraso en la aplicación de estas decisiones continúa la distorsión de la competencia en los mercados relevantes», y destacó que «está particularmente preocupada por que continúen los pagos de los subsidios ilegales en detrimento de otros operadores».
En consecuencia, indicó, ha decidido remitir el caso directamente al Tribunal de Justicia por la violación de las reglas comunitarias de ayudas de Estado.
La CE recordó que, de acuerdo con el principio de neutralidad tecnológica, la financiación pública debe estar disponible para todos los tipos de transmisión –incluyendo terrestre, por satélite, cable o internet–, y apuntó que España violó este principio al otorgar subsidios solo a la TDT.