Bezoya, obligada a retirar su publicidad de agua mineral por engaƱosa
El grupo alimentario Leche Pascual recibe un severo correctivo del organismo que supervisa y controla los mensajes publicitarios
Vender agua con un concepto engañoso. Eso es lo que ha dicho Autocontrol, el organismo que supervisa los contenidos de los mensajes publicitarios, en una resolución aprobada por la que considera que la publicidad que realiza el Grupo Leche Pascual sobre su agua mineral Bezoya es engañosa para el consumidor; incurre en prácticas comparativas denigrantes para los competidores y supone una falta deontológica al incluir conceptos excluyentes que inducen a pensar que otras marcas de aguas minerales pueden ser perjudiciales para el consumidor. El núcleo de la controversia parte de la divulgación que Pascual realizaba de la muy escasa mineralización de su agua, convirtiendo ese hecho (que la sitúa por debajo en niveles de calidad) como un atributo de bienestar y mejora metabólica de sus consumidores.
Autocontrol exige a Grupo Leche Pascual la retirada inmediata de los anuncios y demás piezas publicitarias que incluyen los contenidos rechazados. La resolución del organismo de control publicitario se ha producido a petición de Aguas Font Vella y Lanjarón, que se consideran perjudicadas por los mensajes publicitarios de Bezoya.
La resolución analiza el conjunto de los mensajes incluidos en la publicidad de Bezoya que hacen referencia a “quédate con lo bueno” “te ayuda a sentirte mejor” y al uso que se hace de conceptos como “mineralización débil” o “residuo seco”.
Mensajes engañosos
A juicio del organismo no existe relación de causalidad entre que el agua de Bezoya tenga mineralización débil y el sentirse mejor, por lo que produce un claro engaño al consumidor.
La resolución establece que el uso de conceptos como residuo sólido y mineralización junto con mensajes como Ā«el agua que te ayuda a sentirte mejor o quédate con lo buenoĀ«, transmite de forma clara una duda genérica sobre otras aguas minerales con otro nivel de mineralización o con un residuo sólido mayor. Para Autocontrol, esto es publicidad comparativa denigratoria para los competidores, que está expresamente prohibida.
Equívoco con los componentes minerales
El dictamen también determina que Bezoya incurre en infracción deontológica, ya que el uso conjunto de todos los conceptos utilizados en sus campañas transmiten un mensaje claro en el sentido de que sólo las aguas con sus niveles de mineralización y residuo sólido son beneficiosas y que las que poseen otros niveles diferentes son perjudiciales.
Autocontrol deja claro que en publicidad de aguas minerales no se puede asociar una idea de beneficio específico, para la salud o en cualquier otro sentido, con los niveles de mineralización de las mismas, pues no hay nada que pruebe esa relación.
Defensa fallida
La resolución de Autocontrol examina en su conjunto todos los mensajes publicitarios y el efecto global que ejercen en el consumidor, que es muy diferente del que pueden provocar si se examinan por separado. Ese ha sido el argumento que ha utilizado Bezoya en su defensa y que ha sido rechazado por el organismo publicitario.