Atlantia pagará hasta 10.000 millones por la tragedia de Génova
Mediobanca cree que el coste por la tragedia será superior al consenso de los mercados, que calculan una indemnización de entre 8.800 y 7.500 millones
Los mercados hacen cuentas y piensan cuál será el coste que tendrá para Atlantia la tragedia del desprendimiento de Génova, cuyo número de muertos asciende ya a 43. El primer consenso de los inversores considera que la empresa tendrá que enfrentarse a un pago de entre 8.800 y 7.500 millones de euros, pero el último informe de Mediobanca ha sido mucho más contundente.
El banco de inversión italiano cree que el pago puede llegar a ser de hasta 10.800 millones de euros y que Atlantia podría terminar “bajo una gran presión financiera”, siempre y cuando “no se reconozca ninguna compensación por la revocación de la concesión”. Es decir, que el Ejecutivo italiano no dé los 20.000 millones de euros que el holding que dirige Giovanni Castellucci dice que le corresponde si no puede continuar con su actividad hasta 2042, año en el que finaliza la concesión.
Mientras, todos se mueven. Austostrade, subsidiaria de Atlantia y responsable de la gestión del puente de Génova, anunció una junta extraordinaria para evaluar la situación, mientras que Giuseppe Conte, secretario del primer ministro de Italia, comunicó que iniciaba con el procedimiento correspondiente para revocar la concesión.
Giuseppe Conte, sobre los 500 millones ofrecidos por Atlantia: “Es una cantidad muy modesta”
El Ejecutivo populista formado por el Movimiento 5 Estrellas y Liga, con Conte, Luigi Di Maio y Mateo Salvini, está presionando al máximo a pesar de que la justicia italiana no ha pronunciado un primer dictamen.
Consideran que el fondo de 500 millones de euros que la sociedad Atlantia puso a disposición de los damnificados este domingo es insuficiente. Concretamente, en palabras del político italiano, esta cantidad “es muy modesta” si se compara con las ganancias obtenidas por la empresa a lo largo de los años, por lo que apunta que “podrían cuadruplicarlo o quintuplicarlo”.
En todo caso, afirmó, “estas sumas pueden ser aceptadas solo como parcial resarcimiento” y al margen del procedimiento abierto por el Gobierno para retirar la concesión.
El Gobierno de Italia añade más incertidumbre
La otra gran incógnita es qué pasará con el resto de carreteras, después de que, tal y como afirmaron tanto Di Maio como Toninelli (Fomento), la nacionalización de la gestión de las autopistas italianas es posible «si las concesionarias privadas no las mantienen como es debido».
Y es que la revocación de las concesiones en Italia arriesga dos tercios del negocio de Atlantia porque Autostrade, piedra angular del proyecto de la que posee más del 86% del capital, es el primer gestor privado de autopistas del país y uno de los más importantes de Europa.
Atlantia ha perdido más del 25% de su valor desde el 14 de agosto, día en el que se produjo el desprendimiento del puente de Génova. Sus acciones han pasado de valer 23,54 euros a 18,43 euros y, solo en solo un día, el jueves 16, se dejó 4.400 millones de euros de su capitalización bursátil.
El golpe a Atlantia, propietaria del 100% de Autostrade, afecta tanto a la familia Benetton, que controla el 30,25% a través de Edizioni, como al resto de inversores. Ellos son la Caja de Ahorros de Turín, con el 5,08%; el segundo mayor accionista, con el 8,14%, GIC, fondo soberano de Singapur; el fondo americano Blackrock (5,12%) y el banco británico HSBC (5,01%).