Almirall olvida la crisis: en 2018 ganará más de lo esperado
La farmacéutica de la familia Gallardo incrementa su previsión de beneficios y asegura que su Ebitda rondará los 185 millones de euros
Al fin buenas noticias para los Gallardo. Si en 2017 la farmacéutica familiar Almirall perdió 303 millones de euros por culpa de la crisis de su filial estadounidense, Aqua, la empresa luce un aspecto muy diferente en el ecuador de 2018. La compañía ganó 52 millones de euros en el primer semestre frente a unas pérdidas de 73,1 millones del mismo periodo del año anterior y elevó sus previsiones de resultados para el ejercicio al completo.
En la presentación de resultados, la cotizada española informó de que su Ebitda crecerá alrededor del 30% este año, lo que sitúa la cifra en unos 185 millones de euros. La estimación anterior era que la subida sería del 20%, que fijaría el resultado de explotación en unos 170 millones. Además, los ingresos se elevarán «un dígito medio» frente a los de la temporada pasada.
Almirall confirmó así el vuelco a sus números que ya se apuntaba en el primer trimestre, cuando anunció un aumento del beneficio del 57%. El giro llegó de mano de un crecimiento de las ventas del 5,1%, desde los 378,9 millones hasta los 398,3 millones. El margen también subió: desde el 66,7% hasta el 68,8%.
Mientras, el Ebitda prácticamente se duplicó para tocar los 105,5 millones de euros frente a los 58,6 millones del semestre comparable. La diferencia alcanza el 80%.
En el comunicado enviado a la CNMV, la empresa celebró el desarrollo de su franquicia de psoriasis y añadió que su primer medicamento biológica, el Ilumteri, recibió hace pocos días la opinión favorable del Comité de Medicamentos de Uso Humano de la Unión Europea.
Los inversores premian a Almirall
Los inversores recibieron positivamente los anuncios de Almirall, y la acción de la farmacéutica subía el 4,45% alrededor de las 15.00 horas de la tarde. El valor alcanzaba los 11,97 euros frente a los 11,46 con los que abrió la jornada; todavía lejos de los 12,04 euros por participación en los que se movía a mediados de julio y que son sus máximos anuales.