Air Europa y Vueling denunciarán a la Generalitat por las ayudas a Spanair y Ryanair
Los presidentes de ambas compañías pactan acciones legales conjuntas contra el Govern catalán por “distorsión de la libre competencia”
Vueling y Air Europa han perdido la paciencia y emprenderán acciones legales conjuntas contra la Generalitat, según ha podido conocer Economía Digital de fuentes de ambas compañías. La gota que ha colmado el vaso ha sido la entrega a Spanair de 10,5 millones en forma de préstamo del Instituto Catalán de Finanzas. El crédito se vehiculará a través de Fira de Barcelona con el aval del Ayuntamiento de Barcelona.
Pero no ha sido el único agravio, según estas empresas. Las subvenciones a Ryanair para que no abandone Girona ni Reus tras su desembarco en El Prat están también en la lista de medidas cuestionadas. Ambas operadoras tachan las ayudas públicas directas e indirectas como “acontecimientos muy graves dentro de la aviación comercial de Catalunya”.
La libre competencia en Catalunya está en peligro, según ambas empresas, por intereses puramente políticos. En el caso de Spanair para contentar a ciertos lobbies mientras que con Ryanair quieren llenar la terminal T2 del aeropuerto de El Prat y mantener por encima de sus posibilidades reales a los aeropuertos de Reus y Girona, según fuentes consultadas por este diario en ambas aerolíneas.
Por todo ello, Vueling y Air Europa estudian emprender medidas judiciales conjuntas, no contra los beneficiarios de estas ayudas, sino contra la Generalitat de Catalunya. La posibilidad es tan madura que los presidentes de Vueling y Air Europa, Josep Piqué y Juan José Hidalgo, se reunieron a finales de la semana pasada en Madrid para estudiar los últimos flecos de la estrategia conjunta, según ha podido saber Economía Digital.
Trato de favor
Hidalgo ha calificado recientemente de “indignantes las ayudas a Ryanair”, no sólo las directas, sino también las indirectas como la bonificación de tasas aéreas. El presidente de Globalia, holding propietario de Air Europa, ha asegurado que con las ayudas que Ryanair recibe de las comunidades autónomas “se favorece a los entrantes y se penaliza a los históricos”. Otros directivos de Globalia opinan extraoficialmente que con su actual política, la Generalitat sólo logrará transformar a El Prat en un aeropuerto low cost “donde tendrían cabida determinadas compañías”, exponentes del modelo contrario al deseado públicamente por las administraciones catalanas.
El presidente de Vueling, Josep Piqué, por su parte, se preguntó tras conocerse las últimas ayudas a Spanair “qué pensarán otras empresas que han desaparecido o que pasan enormes dificultades y que no han recibido este extrañísimo trato de favor”. Piqué lamentó que “el Govern no haya sido coherente con su programa de austeridad apoyando iniciativas que deberían circunscribirse al ámbito estrictamente empresarial”.