Adif elige a SNCF y a Ilsa para competir con Renfe por el AVE
Adif elige a la compañía italiana y a la francesa para poner en marcha la liberalización del AVE
El consejo de administración de Adif ha elegido, por unanimidad, a la operadora francesa SNCF y al consorcio formado por Ilsa-Trenitalia (Air Nostrum y Trenitalia) como candidatos para operar las principales líneas de alta velocidad de la red española. Ambos competirán con Renfe, que también se ha adjudicado un paquete para operar las líneas de alta velocidad.
En concreto, Renfe Viajeros se ha preadjudicado el paquete A, tal y como se esperaba; el consorcio Ilsa, compuesto por Trenitalia y Air Nostrum, se ha quedado con el paquete B; la francesa SNCF se queda finalmente con el último paquete, el C.
A partir del próximo 14 de diciembre de 2020, tres empresas podrán operar en los corredores Madrid-Barcelona-frontera francesa, Madrid-Levante y Madrid-Sur, en los que se aumentará la oferta comercial un 65%.
La firma de los acuerdos marco entre los candidatos y Adif está prevista para antes del próximo 15 de marzo, si bien la suscripción definitiva requerirá la aprobación de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Los objetivos de la liberalización del AVE son tres: aprovechar y rentabilizar al máximo la red — se han invertido 51.000 millones de euros —, aumentar el número de viajeros y bajar el precio de los billetes.
Adif, según ha comunicado, recibió solicitudes de capacidad superiores — e incompatibles entre sí— a la que había ofrecido. La empresa pública que tiene a Isabel Pardo de Vera como presidenta destacó durante el proceso que había recibido un volumen de demandas «sin precedentes en Europa”. Se procedería, por tanto, «a activar los mecanismos de priorización”.
Durante el proceso ha habido tiempo para las críticas, que han ido para los cánones de Adif. Se trata de las tarifas que la compañía cobrará a los operadores ferroviarios por utilizar sus vías y estaciones.
Quién no se sube al AVE
La decisión de Adif supone dejar fuera al consorcio Talgo-Globalia. El grupo que controla Air Europa se unió a Talgo, que contaba con el apoyo financiero del fondo de inversión Trilantic Europe, su accionista.
También se queda sin ninguna preadjudicación las empresas Globalvía y Eco Rail. La primera está controlada por el fondo canadiense OPTrust, el británico USS y el holandés PGGM; la segunda es una filial del grupo andaluz Magtel, que cuenta con licencia ferroviaria y certificado de seguridad desde hace seis años.