Acciona ‘se pilla los dedos’ de nuevo en Cáceres
La justicia de Extremadura reitera que el contrato está anulado por fallos en el proceso de adjudicación
El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número uno de Cáceres (Extremadura) ha dado este lunes un nuevo varapalo a la filial de agua de Acciona. El magistrado Jesús Luis Ramírez reitera que el proceso de adjudicación del servicio de abastecimiento y depuración de agua del municipio está mal hecho. Por lo tanto, el contrato del consistorio con la compañía de la familia Entrecanales, que se firmó en 2012 y duraba 24 años, no es válido.
Es la segunda vez que la justicia tumba la concesión. En esta ocasión, a raíz de un recurso presentado por Canal Isabel II, la gestora de agua de Madrid que se encargaba hasta hace tres años de ofrecer el servicio en Cáceres. El pasado mayo ya se anuló la adjudicación a petición de Aguas de Cáceres, otra de las empresas que participaba en el concurso. Queda pendiente saber si acudirá a los tribunales la cuarta compañía que presentó una oferta por el servicio y perdió frente Acciona por los mismos fallos detectados en el proceso, Aqualia (FCC).
Recurso ante el TSJE
Acciona y el Ayuntamiento de Cáceres ya han presentado un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJE) para defender el concurso y su adjudicatario final, según informan a Economía Digital fuentes conocedoras del proceso.
Discrepan con Ramírez en señalar que el cálculo de los costes de la gestión y el método de gestión que se proponía era un requisito indispensable del pliego de condiciones del concurso. Al no adjuntar esta información, Canal Isabel II, Aguas de Cáceres y Aqualia recibieron una penalización que el juez considera que es excesiva. El magistrado asegura que la falta de la documentación no implica que no se valore la oferta técnica, como finalmente ocurrió. Por ello, anula el proceso y obliga a que la mesa de contratación se reúna de nuevo para adjudicar el servicio.
Aigües Ter Llobregat
Las dudas sobre la pulcritud administrativa en el proceso de adjudicación también han dejado en el aire otro contrato importante para la compañía de los Entrecanales: la gestión de Aigües Ter Llobregat (ATLL). El litigio que mantiene en Catalunya contra Aguas de Barcelona (Agbar) junto a la Generalitat también se basa en la interpretación del pliego de condiciones del apartado técnico.
El conflicto se resuelve directamente en el Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC), quien debe decidir en los próximos meses si da un espaldarazo o tumba la concesión. Está en juego un servicio que tiene una vigencia de 50 años y un coste final de aproximadamente 1.000 millones de euros. Acciona ha adelantado casi 300 millones a la Generalitat para tomar las riendas de la empresa privatizada. La adjudicación de Cáceres sólo ha costado a la compañía de los Entrecanales 37,7 millones de euros.
Acciona cobrará indemnizaciones millonarias si pierde alguna de las dos concesiones, según fuentes del sector. No ha podido evitar la polémica al garantizarse estas retribuciones.