Acciona asegura que el Govern le presionó para cerrar la adjudicación de ATLL
Los Entrecanales presentan un escrito de alegaciones para conservar la gestión de las aguas catalanas
Acciona ha tomado al pie de la letra el dicho de que no hay mejor defensa que un buen ataque y ha cargado contra el Govern en un nuevo capítulo de la guerra del agua. El grupo de los Entrecanales ha presentado un escrito de alegaciones ante la consejería de Territori en el que asegura que el Ejecutivo de Artur Mas le presionó a finales de 2012 para firmar precipitadamente la adjudicación de Aigües Ter Llobregat (ATLL), la empresa que da agua potable a cuatro millones de catalanes de Barcelona y su área de influencia.
La compañía afirma que presentó por «prudencia» dos escritos al Govern en los que solicitaba que no se firmase la adjudicación hasta que el órgano de mediación de la contratación pública en Cataluña, el Tribunal Català de Contractes del Sector Públic (la antigua Oarcc), respondiera al recurso que había presentado su rival en la licitación, Agbar.
Amenaza de perder la fianza
La mesa de contratación rechazó la petición de los Entrecanales y el resto de minoritarios que participaban en el consorcio, tal y como relatan en el escrito. «Sólo ante la amenaza de verse excluidos de la adjudicación y privados de la fianza constituida por importe de 10 millones de euros, procedieron a la firma del contrato y al consiguiente pago de la primera parte del canon por importe de 298.651.830 euros».
Es precisamente esta cantidad la que la Generalitat debería desembolsar en efectivo en el momento en el que decidiera anular el contrato firmado el 27 de diciembre de 2012. Acciona avisa en el mismo documento que la extinción de la concesión implica que el Govern devuelva «las inversiones realizadas» y que consolide 995,5 millones más de déficit en el cierre de los tres últimos ejercicios.
Nueva mesa de contratación
Los Entrecanales también cargan contra el modo elegido por Mas para solucionar la guerra del agua: encargar a una nueva mesa de contratación que analice cómo se cumple con las resoluciones del Tribunal Supremo, que respalda a la antigua Oarcc a rechazar las medidas cautelares solicitadas por el Ejecutivo y el consorcio adjudicatario y obliga a cumplir con su mandato. Es decir, a excluir a Acciona del proceso y revertirlo. La compañía también defiende que la resolución del órgano de mediación tiene múltiples defectos de forma que invalidan su aplicación.
El grupo con sede en Madrid considera que el mandato del Govern a la nueva mesa «no está entre las competencias propias que tales órganos tienen atribuidos». En línea a una reclamación previa de Agbar, quien considera que no se ajusta a derecho incluso su puesta en marcha.
Mantener la gestión de ATLL
Esta es la única coincidencia que han tenido ambas empresas a lo largo de la guerra del agua. Acciona aprovecha el escrito para poner de nuevo sobre la mesa que la oferta de Agbar también debe ser excluida de la adjudicación porque tampoco cumple el calendario de obras (su mismo error, según el Oarcc) e incluso presenta documentación en inglés, algo que no contemplan los pliegos de condiciones.
El objetivo de los Entrecanales es mantener la gestión de ATLL.