Abertis alcanza la recta final para controlar seis autopistas en Australia
La compañía de infraestructuras invertirá unos 4.000 millones de euros para controlar seis concesiones en el estado de Queensland si resulta adjudicataria final
El proceso de globalización de Abertis no le tiene miedo al planeta. La empresa especializada en la explotación de infraestructuras ha llegado a la fase final del proceso de privatización de un conjunto de seis pequeñas autopistas en el estado de Queensland (noreste de Australia) que tiene un valor aproximado de 4.000 millones de euros (unos 6.500 millones de dólares australianos).
El grupo español que dirige Francisco Reynés ha superado las fases previas de la puja y se ha quedado con un único competidor para adjudicarse las concesiones por un periodo de 60 años. Al parecer, Abertis disputará el último tramo con el grupo australiano Transurban. Los dos finalistas y el resto de consorcios que optaron a la concesión presentaron sus ofertas en febrero y esperan conocer la decisión final en abril próximo.
Mayoritaria en el consorcio
Las autopistas e infraestructuras que se someten a privatización suman unos 70 kilómetros de peaje. Se trata de las vías Go Between Bridge, Clem7, Gateway, Gateway Extension y Logan, todas ellas son las que conectan toda el área metropolitana de la ciudad de Brisbane.
Abertis lidera un consorcio en el que cuenta también con la participación del fondo australiano Hasting Funds Management y en el que según diversas fuentes financieras podrían tener participaciones minoritarias el fondo soberano Kuwait Investment Authority y el fondo de pensiones holantes APG Algemene Pensioen Groep.
Sector público en venta
El organismo encargado de traspasar al sector privado la red viaria y actual gestor de las autopistas es el Queensland Investment Corp, un fondo público propietario de la empresa a privatizar, la Queensland Motorways Limited.
El consorcio competidor que lidera Transurban Group (operador de autopista en los estados de Victoria y Nueva Gales del Sur) anunció que se presentaría al concurso de la mano del fondo de pensiones AustraliansSuper y un fondo soberano de Abu Dhabi.
Giro estratégico de Reynés
La estrategia de Abertis puesta en marcha por su actual consejero delegado de regresar al negocio tradicional y desinvertir en activos no estratégicos le ha llevado a desprenderse de sus concesiones aeroportuarias en los últimos meses. Sin embargo, el grupo opta a consolidar sus negocios más rentables y, en esa línea, Australia, como Estados Unidos y algunos países occidentales de Europa, se han convertido en objetivo prioritario de la firma con sede en Barcelona.
De resultar finalmente adjudicatario, Abertis asumiría la inversión en Australia con cargo a sus propios recursos y sin necesidad de endeudamientos adicionales, según explican fuentes financieras.