En el ámbito económico, son muchos los términos procedentes del lenguaje inglés que juegan un papel fundamental. Dentro de ellos, el pool bancario es uno de los que juega un papel más importante a nivel mercantil. Y a grandes rasgos, este término hace referencia a la relación entre banco y empresa, aunque entraña aspectos que van mucho más allá de esto.
También conocido como agrupación bancaria, se trata de un informe financiero que reúne todas las fuentes de financiación de una empresa o unidad económica a lo largo de un periodo de tiempo determinado. Por ello, este informe financiero tiene una información sumamente valiosa para el sector financiero en el estudio de operaciones crediticias.
Los aspectos imprescindibles a conocer sobre el pool bancario
Dicho de otra forma, y a grandes rasgos, este pool bancario es un resumen de la deuda y los productos que una empresa ha obtenido por parte de diferentes entidades bancarias, motivo por el cual es de gran utilidad no solo para las empresas, sino para todas las partes interesadas, siendo fundamental para un total de tres actores en concreto.
En primer lugar, para la empresa, el pool bancario le permite tener una versión global de la situación financiera, lo cual facilita la toma de decisiones sobre la gestión de sus recursos. En lo que respecta a las entidades bancarias, este informe les permite evaluar el riesgo crediticio de las empresas que piden un préstamo. Y por último, los inversores que quieren invertir en una empresa, encuentran en este pool bancario un modo de evaluar la salud financiera de la propia empresa.
Pero, a la hora de la verdad, ¿cuál es la información que aparece en un pool bancario? Entre las más destacables, se encuentra en primer lugar la identificación de la entidad bancaria, en la que podemos encontrar el nombre y todos los datos relativos a la entidad bancaria que ha otorgado un préstamo. También destacan el tipo de producto financiero, ya sea un préstamo, aval o cualquier tipo de operación financiera, así como también el importe del producto en cuestión.
Más allá de esto, podemos toparnos también con las condiciones del producto en cuestión, con aspectos como el tipo de interés o el plazo de vencimiento, también el saldo pendiente, con la cantidad de dinero que la empresa aún debe al banco, y también, como no puede ser de otro modo, la fecha de vencimiento en la que el producto financiero vence y la empresa debe devolver el dinero al banco.
La elaboración de este informe corre a cargo del departamento financiero de la empresa por norma general, aunque, por otro lado, algunas empresas suelen recurrir a asesores financieros externos para que les ayuden a elaborar dicho informe. No obstante, es importante remarcar que son se trata de un contrato legal, sino que actúa más a modo de documento informativo.
