Acuerdo de corresponsalía: qué es y para qué sirve

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En el ámbito financiero y bancario, los acuerdos de corresponsalía juegan un papel crucial para facilitar las operaciones internacionales. Estos acuerdos permiten a las instituciones financieras ofrecer servicios en mercados donde no tienen presencia física directa, conectando a clientes y empresas con una amplia red global de servicios bancarios. 

Un acuerdo de corresponsalía es un contrato entre dos entidades financieras, generalmente entre un banco local y un banco extranjero, mediante el cual una de las instituciones actúa como intermediaria para la otra en un país o mercado donde esta última no tiene presencia física. En términos más simples, un banco corresponsal ofrece una serie de servicios financieros, como transferencias internacionales, pagos, cobros y cartas de crédito, en nombre de otro banco que carece de infraestructura o representación directa en esa jurisdicción. 

Todo lo que debes conocer respecto al acuerdo de corresponsalía 

Cabe destacar que este tipo de acuerdos son comunes entre bancos comerciales, pero también pueden involucrar a otras entidades financieras como cooperativas de crédito o compañías aseguradoras. A través de estas relaciones, los bancos pueden ampliar su red de servicios y permitir que sus clientes realicen transacciones internacionales de manera más eficiente y segura. 

Pero, ¿cómo funciona? Los acuerdos de corresponsalía permiten que un banco local o banco respondiente utilice los servicios de un banco extranjero o banco corresponsal para realizar una variedad de operaciones financieras, especialmente aquellas relacionadas con el comercio internacional. Y son varios los servicios que incluyen. 

Comenzando por las transferencias de dinero internacionales, ya que cuando una empresa o individuo necesita enviar o recibir dinero desde o hacia otro país, el banco respondiente puede procesar la transacción a través del banco corresponsal, que actúa como intermediario. También en el comercio internacional, una carta de crédito es un documento emitido por un banco que garantiza el pago a un exportador si se cumplen ciertas condiciones. Un banco corresponsal facilita la emisión y el cobro de estas cartas entre el importador. 

Por otro lado, los bancos corresponsales pueden encargarse del cobro de cheques en moneda extranjera, permitiendo que los clientes reciban los fondos en su moneda local sin la necesidad de una infraestructura bancaria directa en el país emisor del cheque. Además, los acuerdos de corresponsalía también pueden involucrar la gestión de depósitos y préstamos en divisas extranjeras, facilitando el acceso al crédito internacional. 

Para que este tipo de relación funcione, el banco corresponsal mantiene una cuenta “nostro” o “vostro” con el banco respondiente, según el acuerdo. Una cuenta nostro se refiere a la cuenta que el banco respondiente tiene con el banco corresponsal en su país, mientras que una cuenta vostro es la cuenta del banco corresponsal en el banco local. Estas cuentas permiten que las transacciones se realicen de manera fluida entre las dos entidades. 

Por todo ello, y a modo de conclusión, un acuerdo de corresponsalía es una relación contractual entre dos bancos que permite a uno de ellos ofrecer servicios financieros internacionales a través de la infraestructura del otro. Este mecanismo es esencial para facilitar el comercio internacional, promover la inclusión financiera y garantizar la fluidez de las transacciones globales.

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