Un fondo global es un tipo de inversión colectiva que agrupa activos financieros de diversos países y regiones, permitiendo a los inversionistas acceder a una cartera diversificada a nivel internacional. En el ámbito económico, estos fondos son gestionados por profesionales que invierten en diferentes mercados alrededor del mundo, incluyendo acciones, bonos, y otros instrumentos financieros.
Por ello, el objetivo principal de un fondo global es maximizar el rendimiento ajustado al riesgo mediante la diversificación geográfica. Estos fondos pueden ser atractivos para los inversionistas que buscan exposición a economías emergentes y desarrolladas, así como para aquellos que desean protegerse contra riesgos específicos de un solo país o región. Al invertir en múltiples mercados, los fondos globales pueden reducir el impacto de las fluctuaciones económicas locales, lo que ofrece una mayor estabilidad en comparación con las inversiones concentradas en un solo lugar.