Un fondo de garantía de inversiones es un mecanismo financiero destinado a proteger a los inversionistas en caso de que una entidad financiera, como una casa de bolsa o una sociedad de valores, enfrente dificultades económicas graves o llegue a declararse insolvente. Su principal función es asegurar una compensación parcial o total a los inversionistas, cubriendo las pérdidas que podrían sufrir debido a la incapacidad de la entidad para devolver los activos que administraba.
En el ámbito económico, estos fondos de garantía de inversiones son esenciales para mantener la confianza en el sistema financiero, ya que brindan a los inversores minoristas un respaldo en situaciones de riesgo inesperado. Este tipo de fondo generalmente es financiado mediante aportaciones obligatorias de las entidades financieras que participan en el mercado, que habitualmente se encuentran bajo la supervisión de organismos reguladores gubernamentales. No obstante, su cobertura puede variar según el país y la legislación correspondiente.