El producto de Ikea que te ayudará en la vuelta al cole y se adapta a niños de cualquier edad
FLISAT es el mueble perfecto para acompañar a los niños en la vuelta al cole, y puede durar muchos años en nuestra casa
Ya encara la recta final del verano, mientras muchos piensan en alargar lo máximo posible la época de playa o piscina, son muchos otros los que ya tienen sus mentes centradas en otras tareas. En el caso de muchos padres de familia, la vuelta al cole ya es una idea que ronda las cabezas de cara a un futuro próximo. Algo que en Ikea han detectado, y ya ofrece diversas soluciones.
Y es que esta vuelta a las clases afecta tanto a los propios niños que ven cómo se acaban sus vacaciones, como a los padres, que reorganizan sus días y sus planes ahora que, dentro de un mes escaso, los pequeños volverán a pasar gran parte del día fuera de casa.
Sin embargo, más allá de eso, la vuelta al cole supone adaptarse a todas las tareas que esta conlleva para niños de todas las edades, desde deberes y estudio para aquellos que ya han cumplido una cierta edad, como simples tareas de concentración para los recién llegados al mundo lectivo. Para todos los casos, Ikea cuenta con una solución perfecta para nuestras casas.
Ikea complementa la vuelta al cole con este producto
Para llevar a cabo todas las tareas que desde el colegio mandan a los pequeños para casa, Ikea ha pensado en FLISAT, lo cual, en otras palabras, es básicamente un escritorio para niños en el que los peques podrán desarrollar de forma cómoda sus deberes, manualidades y todas las tareas derivadas del colegio.
Entre las muchas ventajas con las que cuenta este escritorio, la principal es que tiene tres alturas, por lo que puede adaptarse sin ningún tipo de problemas a cualquier edad y cualquier tamaño, desde los pequeños que aún se encuentran en educación infantil, hasta aquellos que ya encaran la educación primera.
Por otro lado, se trata de un escritorio inclinable, por lo que serán los propios niños los que adapten el escritorio a sus posturas y a su comodidad, y no al revés. Esto no implica que, cuando este mueble se incline, todos los lapiceros, pinturas o rotuladores caigan al suelo, puesto que cuenta con un anclaje encargado de evitar precisamente esto.
Tiene unas medidas de 92×67 cm, mientras que las alturas máxima y mínima oscilan entre los 53 y los 72 centímetros. Por otra parte, cuenta con una estructura de madera de pino macizo, y una parte superior elaborada a través de un tablero de fibras recubierto con pintura acrílica.
Un producto que facilita en gran medida la vuelta al cole en lo referente a todas las tareas que los pequeños llevarán para casa, y que, además, dados sus materiales y sus características, podrá durarnos durante varios años. Un producto que podemos encontrar en cualquier Ikea o en la página web de la cadena sueca por un precio de 99 euros.