Las claves para crear un buen ambiente laboral en tu empresa
Existen varios aspectos a tener en cuenta respecto al ambiente laboral que tienen un impacto directo en la consecución de objetivos
Un empleo va mucho más allá de sencillamente desempeñar una actividad laboral con la cual conseguir determinados resultados. Si bien este es el fin, y lo que podríamos denominar como la punta del iceberg, son muchos los pasos intermedios que son totalmente fundamentales antes de que este objetivo se materialice, ya sea en grandes empresas como Zara, o en otras con muchos menos trabajadores.
Por lo general, las empresas están conformadas por un gran número de personas, las cuales desempeñan todo tipo labores enfocadas a un objetivo común: la consecución de todos y cada uno de los fines impuestos por la empresa, independientemente de cuáles sean estos. Por ello, el equipo humano es, sin lugar a dudas, la parte más importante a tener en cuenta a la hora de sacar adelante una labor concreta.
Por ello, sobre todo cuando hablamos de trabajos presenciales cuando se desarrollan en oficinas, pero también en lo que respecta al teletrabajo y su importancia, el ambiente laboral es, con casi toda seguridad, uno de los aspectos más importantes a la hora de crear el clima idóneo para que la ya mencionada consecución de objetivos sea posible. Algo que es trabajo de todas y cada una de las personas que conforman la empresa en cuestión, en vistas a mejorar la productividad y la comodidad de los trabajadores.
Consejos para crear el clima de trabajo idóneo en una empresa
Son muchos los aspectos que tienen como fin el hecho de crear un ambiente de trabajo saludable en el que todos los integrantes de un equipo se puedan sentir a gusto. Para ello, las relaciones interpersonales son fundamentales a la hora de sentar las bases en lo que respecta a un espacio de trabajo en el que todos aporten su granito de arena. Y así lo asegura el Consejo General de la Psicología de España.
Independientemente de si hablamos de empresas con organización vertical u horizontal, las relaciones del trabajador con cada uno de sus compañeros, superiores o no, determinará en gran parte la eficiencia con la que cada uno desempeñe su función. Un hecho en el que juegan un papel importante factores tan básicos como el respecto, la cercanía, la igualdad que evite situaciones discriminatorias…
Más allá del trato humano, pilar básico de cualquier empresa, las condiciones laborales son el otro gran bastión que fundamenta las bases de una empresa. Como resulta lógico, cuanto mejores sean las condiciones de trabajo de un empleado, tanto a nivel económico, personal, espacial, y un sinfín de aspectos, más cómodamente desempeñará su labor, teniendo un impacto directo sobre los propios resultados.
En esto entra en juego el hecho de contar con un ambiente físico saludable, algo para lo que es necesario contar con buenas instalaciones, con una iluminación y una ventilación adecuada, con todo el material necesario para que el trabajador desempeñe de forma adecuada su labor, con áreas de descanso en las que estos mismos trabajadores dispongan de un espacio para descansar cada cierto tiempo en busca de aumentar su productividad…
El aspecto personal también juega un papel fundamental en la distribución de una empresa. Resulta clave a corto, medio y largo plazo la motivación de cada trabajador a la hora de desempeñar su función. Una motivación dentro de la que entran en juego muchos aspectos, siendo las oportunidades de desarrollo profesional claves. Ningún trabajador quiere estancarse, y la mejor oportunidad no solo para mantener a estos empleados motivados, sino para fomentar la búsqueda de nuevas habilidades, es esa previsión de alcanzar un nuevo puesto a base de esfuerzo y trabajo, brindando un camino de crecimiento viable.
Del mismo modo, otro aspecto que los expertos consideran clave a la hora de generar un buen ambiente laboral, es la confianza, en todos los sentidos y direcciones. Para que un trabajador se sienta capaz de trabajar con autonomía, necesita algo de libertad para poder desarrollar su función a su propia manera, dentro de unos límites evidentes.
Del mismo modo, para el empleado también es importante contar con una confianza en la otra dirección, sintiéndose capaz de poder transmitir cualquier duda, sentimiento o idea con cualquier compañero o superior de la empresa, algo que le ayudará a sentirse mejor valorado, y lo cual, por ende, será de gran ayuda al mejorar su rendimiento.