Sánchez inicia el giro al centro: arropa al alcalde de Sevilla tras su pacto con Ciudadanos
Ferraz, con la plana mayor del partido, arranca la precampaña de las municipales con Antonio Muñoz y diluye el papel de Juan Espadas, sin protagonismo en el acto de este sábado
Pedro Sánchez, flanqueado por Antonio Muñoz (izquierda) y Juan Espadas, el pasado septiembre en Sevilla.
Revalidar el Ayuntamiento de Sevilla, la capital más importante que gobierna el PSOE en toda España, es vital para Pedro Sánchez, que tiene en las próximas elecciones municipales una prueba de fuego para testar la solidez de la marca, a la baja a la luz de las últimas encuestas realizadas en plena polémica por la reforma del Código Penal y las consecuencias de la nueva ley del sí es sí.
De ahí que la capital andaluza, donde se espera una dura contienda entre PP y PSOE por el control del Ayuntamiento, sea la elegida por Ferraz para dar el pistoletazo de salida de la precampaña de las elecciones municipales del próximo 28 de mayo, en las que el socialista Antonio Muñoz ha conseguido esquivar la dinámica de bloques en las que se maneja su partido a nivel nacional y ha logrado este lunes pactar con Ciudadanos, partido que da sus últimos coletazos pese al proceso de refundación en el que se halla inmerso, un acuerdo para sacar adelante el presupuesto de la ciudad de Sevilla para 2023, con 1.158 millones, en un año que, por ser electoral, suele ser inviable tejer alianzas.
En 2019, año de las últimas elecciones municipales, el Ayuntamiento de Sevilla no pudo sacar adelante las nuevas cuentas y tuvo que prorrogar el presupuesto aunque el predecesor de Muñoz, Juan Espadas, logró en años no electorales, desde su minoría en el Ayuntamiento, concitar acuerdos a derecha e izquierda.
Si el arranque del año electoral -municipales, autonómicas en varias comunidades y generales a final de año- es la escenificación de lo que queda por venir, Pedro Sánchez ha dado un cambio de timón en este previo: inicia el ciclo electoral en Sevilla, la mayor administración gobernada por el PSOE, que en lugar de pactar con Podemos -o sus marcas locales- el presupuesto ha preferido llegar a un acuerdo con Ciudadanos.
En un escenario de perpetua polarización, este guiño de Sánchez contenta a los barones socialistas que vienen reclamando del federal una apuesta por la moderación, el alejamiento de los socios nacionalistas de la investidura y un regreso a tesis de no confrontación.
Ya en septiembre del pasado año Sánchez eligió Sevilla, y en concreto el popular barrio de Pino Montano, para iniciar la campaña que llevó por lema El Gobierno de la gente. Sin embargo, las heridas en el PSOE andaluz por la estrepitosa debacle en las autonómicas en las que Moreno arrasó con una inédita mayoría absoluta para el PP, las sucesivas crisis internas de Sánchez con el socio Podemos en un clima de permanente crispación con la oposición lastraron por completo el objetivo de esta campaña, que era el de volver a conectar con la ciudadanía, tarea que el PSOE -y en general todos los partidos- confían en sus alcaldes.
En el mapa nacional, un mal resultado para Pedro Sánchez en las elecciones municipales en Andalucía supondría un duro varapalo y un mal presagio para las generales, aunque los socialistas insisten en no vincular resultados. Hasta la pérdida del Gobierno autonómico en diciembre de 2018, el PSOE ha registrado en esta comunidad sus mejores datos durante décadas en las distintas convocatorias electorales.
En este momento, 460 alcaldes socialistas de 785 municipios que tiene Andalucía se juegan renovar sus ayuntamientos. A día de hoy, el PSOE acumula el 58% de las alcaldías, cuatro capitales de provincia -Sevilla, Huelva, Granada y Jaén- y dos ciudades con más de 100mil habitantes, Dos Hermanas (Sevilla) y Jerez de la Frontera (Cádiz) y 6 de las 8 diputaciones provinciales (todas salvo Almería y Málaga), estructuras donde reside el verdadero poder de su histórica implantación territorial.
En concreto, en la provincia de Sevilla, además de la Diputación, de los 106 municipios de la provincia, los socialistas gobiernan en 72 alcaldías, incluida la capital, (el PP sólo en 8). Según los estudios internos que maneja el PSOE, estarían en las próximas municipales ganará en Sevilla, cosa diferente es si los resultados serán suficientes para gobernar.
460 alcaldes socialistas de los 785 municipios que tiene Andalucía se juegan renovar sus ayuntamientos. El PSOE controla 6 de las 8 diputaciones y cuatro capitales de provincia, entre ellas Sevilla
Enfrente, el Partido Popular también tira de encuestas propias. En rueda de prensa, Antonio Repullo, secretario general del PP andaluz, ha defendido que el «PP reeditará en mayo la confianza de los andaluces en su modelo, basado en el diálogo y la escucha permanente, con el objetivo de consolidar la transformación de Andalucía» iniciada, a su juicio, desde la llegada de Moreno al Ejecutivo andaluz.
El PP juega con el viento a favor de estar en el Gobierno autonómico con una mayoría absolutísima pero, como el PSOE, también se la juega en las próximas municipales: debe comprobar si la marca Juanma Moreno y su popularidad sirve también como carta de presentación en el terreno local o si, por contra, su estela empieza a perder brillo y los errores de gestión -fundamentalmente el malestar ciudadano por la gestión sanitaria- comienza a pasarle factura a los populares.
El PSOE diluye el papel de Espadas este sábado
De esta visita, de la que ha trasladado este lunes en rueda de prensa algunos detalles el secretario general del PSOE de Sevilla, Javier Fernández, trascienden varias lecturas: la primera es que Pedro Sánchez se apoyará en este primer tramo de la precampaña en Antonio Muñoz, figura no desgastada en batallas, entre otras razones porque todavía no se ha enfrentado a la prueba de las urnas y no le persiguen, por ahora, las intrigas orgánicas.
En palabras de Fernández, «la figura de Antonio Muñoz está al alza, cae bien», teniendo en cuenta que tan sólo lleva un año en el cargo tras la renuncia de Juan Espadas a la alcaldía, cuando tras ganar el proceso de primarias, dio el paso de dejar el Ayuntamiento para centrarse en la secretaría general del PSOE andaluz y en su labor de oposición a Juan Manuel Moreno Bonilla.
Sevilla como ayuntamiento bandera de las políticas del Gobierno
En este sentido, desde el PSOE de Sevilla defienden que la visita de miembros del Gobierno «suma» y que han sido los propios secretarios generales «los que han pedido que venga [el presidente del Gobierno]». Por lo que está más que asegurada la presencia de manera continuada de ministros -especialmente los andaluces- en los próximos meses en la capital andaluza. María Jesús Montero, ministra de Hacienda y siempre en las quinielas para ser la próxima secretaria general del PSOE andaluz, es una fiel colaboradora de Muñoz desde su llegada a la Plaza Nueva, sede del Consistorio hispalense.
En off, fuentes socialistas reconocen que la estrategia para las municipales variará según la sensibilidad de cada alcalde: «Hay quienes dicen «a mí dejadme con mis votantes» y otros que piensan de otro modo y sí les viene bien todo lo que venga».
La tercera, en clave orgánica, es que de cara al acto del sábado el papel de Juan Espadas, secretario general del PSOE andaluz, está absolutamente diluido. A preguntas de la prensa, Fernández ha insistido en que San Vicente, sede del PSOE regional, estaba al tanto de esta visita, pero no ha sabido concretar qué papel tendrá Espadas en el acto. «Estará por supuesto, pero es un acto en clave local, en clave municipalista», ha subrayado.
A falta de concretar espacio y dimensión, el acto está confirmado que se desarrollará en la capital de Sevilla y contará con «el respaldo de toda la cúpula del PSOE federal para lanzar el pistoletazo de salida de la precampaña» así como la presencia y participación de varios alcaldes de la provincia, ha explicado el secretario general del PSOE de Sevilla.
Cabe recordar que en las primarias en las que Juan Espadas ganó a Susana Díaz -de la que no se espera, a priori, participación en la campaña de las municipales en Andalucía-, última gran crisis, si descontamos el fracaso electoral del 19J, que han vivido los socialistas andaluces, el entonces alcalde de Sevilla basó su campaña en la reivindicación del municipalismo y la política útil a pie de calle.
De aquello hace ya un año y medio y el cuestionamiento al discurso de Espadas, su estrategia de oposición y el liderazgo (o la falta de él) en el partido, hace meses que ha empezado a dejar de ser un tabú entre los socialistas, aunque cosa diferente es que estas opiniones logren trascender la barrera del off the record.
